Una mujer canadiense, requerida por Estados Unidos en una causa relacionada con drogas, podría ser extraditada, aun cuando la medida significaría separarla de su pequeño hijo, según un fallo de un alto tribunal de la provincia de Ontario.
La Corte de Apelaciones rechazó el argumento de Joanna Pakulski que sostiene que el ministerio canadiense de Justicia cometió errores.
“El tribunal llegó a la conclusión de que las circunstancias personales de la acusada y el impacto potencial sobre su entorno y su hijo no implican deshonrar los compromisos de Canadá con Estados Unidos”, dijo la corte al argumentar su decisión.
Las autoridades estadounidenses afirman que Pakulski, que reside en Toronto, estuvo implicada en una conspiración para traficar cientos de kilos de marihuana desde Canadá hacia Estados Unidos entre 2003 y 2007.
El rol de la mujer habría sido el de reunir el dinero proveniente de las ventas de la droga e ingresar el mismo al territorio canadiense. En marzo de 2008, las autoridades fronterizas hallaron cerca de 60 mil dólares escondidos en el auto de la mujer, cuando esta ingresaba a su país.
La Real Policía Montada Canadiense arrestó a Pakulski en junio de 2010 y en 2012 se dictó una medida de extradición, que fue demorada ante el pedido de la Corte de Apelaciones para que el gobierno de Canadá analizara nuevamente el caso, en virtud de que la mujer es madre de un niño de corta edad.
El ministerio de Justicia canadiense negó que extraditar a la acusada viole tanto sus derechos como los del pequeño.
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