Aunque el problema de los acentos se ve también en los casos de personas que van de una región a la otra en el mismo país o que van a países que hablan su misma lengua, cuando se trata de un inmigrante cuya lengua materna es diferente a la de trabajo ese acento puede ser la diferencia entre el éxito y la derrota.
Ton Accent, Luis! (Tu acento, Luis) fue presentado hace un año y se convirtió en documento de consulta para quienes saber cómo se vive la integración en la provincia canadiense de Quebec.
Y no son sólo los inmigrantes los que se han interesado en la obra porque muchos dirigentes locales creen que el libro permite, también, ver los desafíos que deben afrontar la provincia y Canadá cuando se trata de la diversidad.
Martín Movilla habló con el autor sobre su libro, su experiencia y sus constataciones sobre la baja representación en la función pública de las comunidades culturales, originarias de otros países.

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