Chicza, el chicle bio de los Mayas

De los Mayas a Canadá, llegó CHICZA, el chicle bio

“La goma plástica que está en el mercado ya sea pegada en los bancos de las calles, en la basura, o en un río, tarda aproximadamente 80 años en degradarse, es una basura que se acumula todos los días.  En México, Estados Unidos y Canadá, se consumen 100 millones de pedazos de plástico, de chicle, por día. Es una acumulación de contaminantes plásticos terrible para nuestro planeta”.   Luis Serrano, representante de la comunidad maya chiclera en Canadá.

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Un trabajador maya elaborando la goma de mascar

Desde hace 300 años, los mayas de México mastican chicle extraído del zapote, un árbol frutal llamado en México chicozapote. La savia recogida de este árbol es un látex natural que, cuando se hierve y se procesa, puede convertirse en una goma de mascar.

“Los mayas eran muy sabios en cuanto a ciencia y gastronomía. Dado que el chicozapote se encontraba en su hábitat descubrieron la savia del árbol que tenía propiedades extraordinarias. Comenzaron a masticarla por varios motivos. Para combatir el estrés, para producir saliva, encontraron que tenía beneficios para el sistema digestivo. Es parte de su cultura”.

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Luis Serrano, representante de la comunidad maya chiclera en Canadá

Hoy en día, la empresa social Consorcio Chiclero gestiona la producción de cultivos ecológicos de 1,3 millones de hectáreas de selva tropical en el sureste de México.

Y comercializa el chicle Chicza, orgánico y biodegradable. Su producción beneficia a toda una comunidad, más de 1.500 miembros de 56 cooperativas.

Los mayas son los beneficiarios directos de este proyecto Chicza. Al ser su casa, ellos resguardan la selva tropical maya. Toda la región del Petén que abarca el sur de México, es una selva protegida. No hay tala de árboles, no hay una degradación de la selva como lo vemos en otros lados. Porque es el hábitat de los mayas y ellos viven de la extracción de la goma de mascar, por lo tanto, la cuidan. De la extracción a la fabricación y comercialización, todo lo hacen ellos. Eso significa bienestar para sus familias, agua potable, casas de material, becas para que estudien los niños.”

En la entrevista, Luis Serrano, representante de la comunidad maya chiclera en Canadá nos explica el origen de la producción de chicle. ¿Fue un invento maya?

¿Un chicle miel de arce?

Esto y mucho más en la entrevista.

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Categorías: Economía, Indígenas, Internacional, Medioambiente y vida animal
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