Francisco Ramírez Cuellar es un abogado colombiano, activista sindical y responsable de Derechos Humanos de Funtraenergética, la Federación de Trabajadores minero-energéticos de Colombia, que reúne a trabajadores del sector minero y petrolero que es bastante amplio en el país debido a los recientes cambios legales y constitucionales que han permitido la entrada masiva de compañías del sector minero energético. De esta federación también forman parte trabajadores del sector eléctrico, que pertenecen también a ese gran sector, que al parecer representa hoy un problema muy grande para Colombia.
EscucheComo abogado, Francisco Ramírez Cuellar es miembro del departamento legal de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia, CUT. Y como tal, es el responsable de las acciones cívicas internacionales contra compañías multinacionales que han cometido crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad en Colombia.
Él es experto en los impactos negativos de la minería canadiense en Colombia y en la actualidad, se encuentra de gira en Canadá dando una serie de conferencias sobre ese tema. Francisco Ramírez Cuellar es también el autor del libro La gran minería en Colombia: Las ganancias del exterminio (The Profits of Extermination: Big Mining in Colombia).
Pero el objetivo de su gira es fundamentalmente, volver a impulsar aquí en Canadá un boicot, que ya ha tomado forma en varios países, contra la compañía Drummond, acusada de haber creado un grupo paramilitar, de haber asesinado a más de 4.400 personas, entre las cuales 161 trabajadores sindicalizados en Colombia, la desaparición forzada de otras 420 y el desplazamiento forzado de 55.000 personas, afirma Francisco Ramírez Cuellar.
Canadá, por intermedio de la compañía Drummond importa carbón proveniente de la mina a cielo abierto Cerrejón, situada en el departamento de la Guajira, en el norte de Colombia. Cerrejón es una empresa conjunta de gestión independiente, perteneciente en tres partes iguales a BHP Billiton, Anglo American y Glencoe.
Francisco Ramírez Cuellar en entrevista con Pablo Gómez Barrios, denuncia a la compañía Drummond y pide a los canadienses que cesen de comprar carbón manchado de sangre.
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