Mauricio Macri, candidato presidencial de la Coalición Cambiemos, carga en sus hombros a su hija Antonia, mientras celebraba este domingo en Buenso Aires su elección como presidente del país.

Mauricio Macri, candidato presidencial de la Coalición Cambiemos, carga en sus hombros a su hija Antonia, mientras celebraba este domingo en Buenso Aires su elección como presidente del país.
Photo Credit: CBC/Ivan Alvarado/Reuters

Mauricio Macri ganó las elecciones presidenciales en Argentina

El candidato de la opositora coalición Cambiemos, Mauricio Macri, fue elegido este domingo presidente de Argentina en la segunda vuelta con 51.5% de los votos, frente a su rival peronista de centro izquierda Daniel Scioli, que concedió la victoria.

La elección de Mauricio Macri pondrá fin el próximo 10 de diciembre, a un ciclo de doce años y medio de kirchnerismo en el poder.  “Hoy es un día histórico, es un cambio de época que va a ser maravilloso” dijo Macri al celebrar su triunfo ante miles de partidarios reunidos en un centro de convenciones de Buenos Aires, la ciudad de la cual es alcalde desde hace 8 años. El gran mérito de Macri, afirman los analistas, es que rompió con “una historia bipartidista y su nueva forma de hacer política necesitará hacer más política”.

De 56 años de edad, Mauricio Macri había obtenido en la primera vuelta el 25 de octubre pasado un inesperado 34.3% de los votos, justo detrás del delfín peronista Daniel Scioli que tomó la cabeza con 36.9% de los votos.

“El pueblo argentino eligió a un nuevo presidente, Mauricio Macri, a quien acabo de felicitar por teléfono”, dijo ante sus partidarios Daniel Scioli, quien contaba con el apoyo de la presidenta Cristina Fernández.

Mauricio Macri celebra su victoria en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Argentina.
Mauricio Macri celebra su victoria en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Argentina. © SRC/AP/Ricardo Mazalan

La presidenta Fenández deja un país profundamente dividido entre las clases populares que aplaudían los generosos programas sociales instaurados por la pareja Kirchner y los medios de negocios que denuncian los numerosos controles instaurados en la economía del país, la tercera en América Latina.

Argentina presenta un importante déficit presupuestario, que Cristina Fernández financió emitiendo más pesos, lo que contribuyó a alimentar una inflación galopante. Las reservas en divisan se encuentran en el más bajo nivel de los últimos 9 años y el país no puede financiarse en los mercados obligatorios desde suspendió el pago de su deuda.

Mauricio Macri prometió durante su campaña electoral, abrir el país a los capitales, levantando los controles sobre los cambios y el comercio, y poniendo fin al pulso entre Argentina y los detentores de obligaciones de la deuda soberana del país, que rechazaron 2 veces, en 2005 y 2010, el escalonamiento de la deuda nacional.

Cristina Fernández habló varias veces en las ondas en las últimas semanas para pedir a los electores que garantizaran el mantenimiento de los programas sociales del gobierno en los campos de la educación, la salud y las madres pobres. “Cuando yo me vaya, quiera Dios que no se destruya lo que tomó tantos años en construir”, dijo Cristina a sus partidarios recientemente.

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