
Tal como se ven las cosas, el país sudamericano está lejos de ver la calma política instalarse para dar paso a colaboraciones reflexivas entre los principales grupos políticos.
Oscar Deguardia es periodista de Radio Uno Regional Gran Rosario –en la Provincia de Santa Fe- y con él abordamos un poco el tema de cómo se ven las cosas en terreno para los argentinos.
Denuncias que van y vienen
Denuncias de corrupción, de malos manejos y de extravagancias del gobierno saliente –el de Cristina Fernández- vienen acompañadas de decisiones gubernamentales que –por momentos- parecen dejar el sin sabor de que se está haciendo lo mismo que se le criticó al período, de 12 años, en el que el país estuvo dirigido por la familia Kirchner.
Hoy se acusa el presidente Mauricio Macri de querer acallar –e incluso censurar- a quienes lo critican, de haber borrado de un plumazo la ley de medios y de estar, antes que nada, ejerciendo la venganza contra sus detractores, sus antecesores y sus antagonistas.
Se habla del desmonte de las garantías populares y del paso a un gobierno que privilegia a los ricos y las corporaciones.
Del otro lado, y entre otras cosas, se acusa a ex funcionarios de los gobiernos Kirchner de participar en entramados de corrupción, malversación y dilapidación de fondos públicos y de haber dejado “nominas paralelas” pagadas por el Estado a personas que pertenecen a un movimiento de los Kirchner.
Se habla incluso de la presunta participación de uno de los hombres más importantes de la administración de Cristina Fernández en alianzas con empresas criminales ligadas al tráfico de drogas.
Ese es el ambiente en el que se ha desarrollado el primer mes de gobierno de un hombre que llegó al poder prometiendo un cambio y que comenzó a hacerlo -en materia económica, por ejemplo- no sin crear descontento en algunos sectores.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.