Documentos recientemente revelados dan una imagen más clara hasta ahora del controvertido modelo del gobierno conservador para acoger a los refugiados sirios el año pasado.
El gobierno de Harper quería expandir su programa de reasentamiento para los refugiados el pasado invierno, pero con un enfoque puesto en las minorías étnicas y religiosas.
Esta decisión desató polémica, dado que las Naciones Unidas no hacen una elección de los refugiados en función de esos criterios.
Documentos presentados en la Cámara de los Comunes, en respuesta a una pregunta del Nuevo Partido Democrático muestran cómo los conservadores desviaron las reglas.
Funcionarios de visas en Beirut y Ammán recibieron la orden de revisar los archivos recibidos de la ONU e identificar las minorías étnicas y religiosas.
Estos registros de las minorías étnicas y religiosas fueron luego objeto de procesamiento acelerado, mientras que otros fueron tratados normalmente, un proceso que estuvo vidente hasta noviembre, cuando cayó el gobierno conservador de Stephen Harper.
Ex ministro de inmigración niega acusaciones
De su lado el ex ministro de inmigración Chris Alexander defiendió el enfoque de su gobierno para el reasentamiento de los refugiados sirios, negando que se diera prioridad a las minorías religiosas y étnicas por parte de los conservadores.
Cada país que trabaja con la agencia de refugiados de las Naciones Unidas sobre la crisis humanitaria en Siria ha operado bajo criterios acordados sobre la forma de decidir qué refugiados aceptarían, dijo Alexander en una entrevista con The Canadian Press.
El principio básico era centrarse en los más vulnerables, pero prioridades adicionales tuvieron que ser aplicadas, dijo Alexander.
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