Una misión especial enviada por la Organización de Estados Americanos (OEA) se reunió este domingo con el presidente de Haití, Michel Martelly, como parte de los esfuerzos para resolver una crisis electoral que amenaza la estabilidad en la nación caribeña.
El mandato de Martelly concluye el 7 de febrero, pero no tiene un sucesor electo. Esto debido a que una serie de protestas denunciando un fraude en la primera vuelta de la elección presidencial llevó a las autoridades electorales a suspender la segunda vuelta electoral que debía llevarse a cabo el pasado 24 de enero.
El Gobierno y la oposición se encuentran en un impase en medio de protestas casi diarias que ambos bandos organizan. Todavía no existe un acuerdo sobre quién gobernará Haití si Martelly deja el cargo sin un reemplazante elegido.
Fritz Jean-Louis, ministro encargado de temas electorales en Haití, declaró que la misión de la OEA discutió con el presidente Martelly y que también se reunirá con representantes de diferentes sectores para facilitar la realización del proceso electoral.
Las críticas a la primera vuelta del 25 de octubre se centran en que se permitió que cientos de miles de representantes partidistas votaran en cualquier colegio electoral, lo que según la OEA fue «visto como una de las principales fuentes de irregularidades».
La segunda vuelta, que habría contado con controles más estrictos, habría sido disputada entre el candidato del partido gobernante Jovenel Moise y el representante de la oposición Jude Celestin.
Haití, el país más empobrecido de América, ha luchado por décadas para construir una democracia estable. Los críticos señalan que la ayuda exterior a menudo no ha estado a la altura de las expectativas, incluso después del devastador terremoto del 2010.
Fritz Jean-Louis dijo que Martelly pidió la ayuda de la OEA para evitar que la crisis política se agrave después del 7 de febrero. Los manifestantes antigubernamentales se oponen a la iniciativa de la OEA, ya que creen que esta serviría para que Martelly continúe en el poder después de la fecha constitucionalmente establecida para que deje la presidencia.
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