Dos exministros del gobierno de Venezuela, bajo la administración del expresidente Hugo Chávez, pidieron una investigación para conocer el destino de 300 mil millones de dólares, presuntamente malversados en la última década, mediante un intrincado sistema de control cambiario.
Héctor Navarro, que ocupó cinco ministerios, pedirá a un comité de ética estatal que revise las operaciones de un sistema de control del cambio de divisas, que líderes de la oposición calificaron como un “mecanismo de corrupción”.
Navarro y Jorge Giordani, un exministro de Economía que fue un estrecho asesor de Chávez durante 14 años, hicieron cálculos que demuestran que el gobierno no es capaz de rendir cuentas de la forma en la que gastó cerca de un tercio del billón de dólares que ingresaron en sus arcas en la última década.
El propio Navarro habló de una “banda interesada solamente en poner sus manos en las finanzas públicas y las ganancias producidas por el petróleo”. El exfuncionaro agregó que los delincuentes no tienen ideología, al tiempo que se definió a sí mismo como un revolucionario.
El hombre no aclaró quién, en su opinión, fue el responsable de malversar los fondos desaparecidos.
Los actuales ministros de Economía y de Información se negaron a comentar los dichos de sus excolegas.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, reconoció en anteriores ocasiones la existencia de corrupción, pero la relacionó con compañías del sector privado, a las que acusa de sacar provecho de la misma.
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