Colombia registró un retroceso en materia de libertad de expresión en 2015, con 232 víctimas, de las cuales 2 perdieron la vida, sostuvo la Fundación por la Libertad de Prensa (FLIP), en su informe anual publicado el lunes.
“Los dos asesinatos ubican al país en el puesto número 11 entre los más sangrientos para el ejercicio el periodismo”, según una lista elaborada por el Comité de Protección de los Periodistas.
En total, 152 trabajadores de prensa han sido asesinados en el país sudamericano desde 1977.
La FLIP, principal asociación colombiana de defensa de la libertad de prensa, agregó que 2015 registró la cifra más elevada de víctimas desde 2009.
Cerca de un tercio de los afectados fue objeto de amenazas, el tipo de agresión más frecuente contra la prensa, afirmó la entidad, precisando que los meses más complicados del último año fueron mayo y octubre, coincidiendo este último con la realización de elecciones regionales y municipales.
En el texto difundido, la Fundación pide mayor transparencia al gobierno del presidente Juan Manuel Santos, tras una serie de escándalos por escuchas telefónicas a periodistas.
La entidad expresó en el informe que “la prioridad para el presidente en los primeros meses de 2016 debe ser dar respuestas claras, públicas y asegurar la aplicación de sanciones ejemplares” en relación a las agresiones padecidas por la prensa.
El escrito concluye que “es sorprendente que el año en el que el país se encuentra al borde de firmar un acuerdo histórico con la guerrilla de las FARC, sea también el período más violento* de los últimos tiempos.
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