La policía dice que muchos padres no tienen «ni idea» de los peligros potenciales
Usted sabe que sus hijos están descargando aplicaciones para mantenerse en contacto con sus amigos, y le parece bien. Esto es especialmente cierto para la mayoría de los niños, pero por desgracia el mismo uso inocente de la mayoría de estas aplicaciones puede llevar a un niño a una situación no solamente no deseada, sino peligrosa en algunos casos.
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Pocos minutos después de descargar Kik, una aplicación de mensajería popular, Alicia, de 13 años de edad, empezó a recibir textos al azar de extraños que querían saber acerca de sus fantasías sexuales.
«Tengo 29 años y quiero ser tu novio,» dice uno de los primeros mensajes que aparecen en el teléfono inteligente.
«¿Qué tan obediente eres?» preguntó otro con el nombre de usuario MasterDaddy.
«Deja que te observe,» fue otro mensajes de texto que quería » fotos en vivo» a pesar de admitir que era lo suficientemente mayor como para ser el padre de Alicia.
Él envió una foto, supuestamente de sí mismo, sonriendo torpemente, como prueba.
«La edad es un estado de ánimo» decía hombre, que parecía estar en la cincuentena.
Sin embargo Alicia no respondió, debido a que ella….no existe.
CBC News creó el personaje y puso una foto con su perfil en línea para ver qué tipo de mensajes no solicitados están recibiendo los niños cuando utilizan Kik, un servicio móvil gratuito para compartir textos, imágenes y vídeos de forma anónima.
Si bien existen preocupaciones de seguridad con otras aplicaciones, la policía y los usuarios de Kik dicen que ésta es particularmente popular entre los adolescentes más jóvenes y los niños, y cuyos padres no están tan familiarizados ya que son sitios de medios sociales como Facebook e Instagram.
Kik Interactive Inc., la empresa que la creó hace siete años en Waterloo, Ontario, dice que tiene 275 millones de usuarios que utilizan la aplicación en un promedio de 35 minutos por sesión.
«El problema que tengo con Kik, en particular, es la capacidad de los extraños para llegar a los extraños», dice el detective sargento Paul Krawczyk, de la unidad de explotación de los niños del Servicio de Policía de Toronto.
A diferencia de muchas otras aplicaciones de mensajería, Kik dispone de mensajes de texto sin límite, junto con juegos con personajes animados y emoji que pueden resultar atractivos para los niños.
Kik permite también a los usuarios enviar mensajes directamente a otros usuarios, sin ser aprobados primero por ellos o a la lista de amigos o contactos.
La policía dice que hay una falta de verificación y de control de los padres con Kik, y con otras aplicaciones, una de las razones que atrae a los depredadores.
Apenas la semana pasada, un hombre en Richmond, en la provincia de Columbia Británica, fue condenado por distribuir pornografía infantil y seducir en internet.
La policía dice que Stephen Reha convenció al menos a cuatro niñas entre las edades de 13 a 16 a las que conoció en Kik que le enviaran fotos explícitas de sí mismas. Después distribuyó las fotos a otras personas que tenían la aplicación.
‘Realmente espeluznante’
«La gente va allí y te hacen preguntas excesivamente sexuales», dijo Desiree, una joven de 18 años oriunda de Toronto, que describe Kik como «realmente espeluznante después de un tiempo.»
Se puso tan mal que Desiree y su madre fueron a la policía para reportar sobre un usuario particularmente agresivo que Desiree era incapaz de bloquear.
Ella dijo que la policía les dijo que «no se puede hacer nada para encontrarlo.»
«Tenemos una gran cantidad de investigaciones que involucran Kik,» dijo Krawczyk, que ha trabajado en casos con niños tan jóvenes como de ocho años de edad.
«No es sólo KiK», apunta. «Si no están usando KiK van a encontrar otra cosa.»
Recientemente, Kik ha sido citado en numerosas investigaciones criminales en toda América del Norte, y las fuerzas del orden y los educadores advierten de sus peligros potenciales.
En los Estados Unidos, la Oficina Federal de Investigaciones está analizando qué papel puede haber jugado Kik en el reciente secuestro y asesinato de una niña de 13 años de edad, de Virginia, Estados Unidos.
Un hombre de 18 años que habría contactado a Nicole Lovell en Kik ha sido acusado, junto con una cómplice, por el asesinato de la adolescente.
Los medios de comunicación de Estados Unidos informaron que el FBI ordenó embargar a Kik como parte de su investigación sobre la muerte de Lovell.
La compañía se negó a dar una entrevista a CBC, pero la refirió a la «Guía para Padres» en su sitio web.
La guía explica cómo funciona la aplicación y qué pueden hacer los padres si su hijo ha enviado o recibido mensajes inapropiados.
Se aconseja a los padres que quieren controlar la cuenta del niño de «pedirle a su hijo de no eliminar los chats, y de permitirle el acceso a su dispositivo.»
La «Guía para la aplicación de la ley», dice, «Kik tiene clasificación 9+ en el iTunes Store y Teen en Google Play, y el usuario debe introducir su fecha de nacimiento y tener 13 años de edad o más con el fin de registrar una cuenta en Kik «.
Krawczyk dijo que la política de la compañía hace poco para evitar que incluso los usuarios más jóvenes abran cuentas, ya sea solos o con la ayuda de los hermanos mayores y amigos.
Él se mostró preocupado pero de ninguna manera conmocionado por algunos de los mensajes que CBC le mostró desde la cuenta de Alicia.
«Aquí estamos viendo sólo el comienzo. Si desarrolla realmente una relación… habría más presión», dijo.
«Y así es como los niños quedan atrapados y lo próximo que sabes es que ya es demasiado tarde.»
Krawczyk dijo que la compañía Kik se ha vuelto más receptiva a las solicitudes de información de las investigaciones policiales, a pesar de las dificultades anteriores, cuando Kik se puso en marcha hace siete años.
Aun así, la guía legal de Kik deja claro que la compañía no «tiene acceso al texto de las conversaciones Kik» y se reserva el derecho «de conformidad con la ley de negarse a proporcionar información.»
Padres despistados
Krawczyk siente que los padres tienen que ser más conscientes de las aplicaciones que están utilizando sus hijos y de cómo funcionan.
Recordó un caso reciente relacionado con una niña de ocho años de edad que envió «imágenes inapropiadas» a un extraño. Cuando se le pidió a los padres de la niña por su contraseña, Krawczyk dice que tuvieron que preguntarle a su hija.
«Es la parte más frustrante de mi trabajo – los padres que no tienen ni idea de lo que hacen sus hijos», dijo.
Él anima a los padres a señalar a sus niños que deben avisar a alguien si reciben mensajes aleatorios de personas que no conocen.
«Si su hijo se queda atrapado en una situación se sentirá lo suficientemente cómodo para venir y decirle:» ¿Puedes ver esto?” Ya hemos pasado por esta situación y es bueno, hay que evitar que se transforme en malo «, dijo.
RCI con información de las periodistas Connie Walker y Marnie Luke, de CBC
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