Hoy en el diario La Presse de Montreal, Stephen Cornish, Director General de Médicos Sin Fronteras, MSF, Canadá, pide a Naciones Unidas que cesen los bombardeos contra civiles. Este martes 3 de mayo, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas estudiará una resolución en la que se le pide a los estados miembros de la organización que reafirmen su obligación de proteger a los civiles, heridos y enfermos en las zonas de conflicto. Una resolución que debe ser adoptada, pero también aplicada rigurosamente dice el director general de MSF Canadá.
Recordemos que el miércoles de la semana pasada, en la ciudad de Alep, norte de Siria, un hospital fue el blanco de bombardeos aéreos por parte de las fuerzas gubernamentales que dejaron un saldo de por lo menos 20 muertos, entre pacientes y personal de este hospital apoyado por Médicos Sin Fronteras.
EscucheEn el transcurso de los últimos meses se señalaron bombardeos parecidos en Yemen y Sudán. Estos bombardeos, que fueron accidentales o intencionales, tuvieron como blanco a hospitales de MSF o hospitales que eran apoyados por la organización. En el mes de octubre pasado un bombardeo contra un hospital de MSF en Afganistán dejó un saldo de 42 muertos. Para Médicos Sin Fronteras esta situación es inadmisible.
Anoche la médica canadiense de la ciudad de Quebec, pediatra de formación, Joanne Liu, presidenta internacional de Médicos Sin Fronteras, MSF, hizo un vibrante llamado a Naciones Unidas en el popular programa Tout Le Monde En Parle (Todo el mundo habla) de la televisión francesa de Radio Canadá, para que cesen los bombardeos a civiles en zonas de guerra.
Joanne Liu no se desalienta y no pierde la esperanza, porque ella se dice que quizá este martes 3 de mayo el mundo va a demostrar de forma colectiva que tiene todavía una humanidad y que la guerra también tiene sus reglas.
El irrespeto de esas reglas la hizo pasar el peor momento de toda su vida, dice la Dra. Liu. Ella cuenta que después del ataque en Afganistán regresó a Kunduz, donde se encontró con el personal de MSF que sobrevivió y habló con un enfermero que había perdido un brazo.
Él le dijo: “Dra. Liu, usted dijo varias veces que el hospital de Kunduz era el lugar más seguro durante todos los combates y la violencia. Nosotros le creímos. Nos mudamos con nuestras familias en el sótano del hospital, trajimos todo lo que nos pertenecía y nos parecía más importante”. Él la miró, se secó una lágrima y le dijo: “¿Sabía usted que nos iban a bombardear?”. Ella le dijo: “lo único que le puedo responder es que hasta el 3 de octubre 2015, yo siempre creí que el hospital de Kunduz, era el lugar más seguro”.
Ese día, el ejército estadounidense bombardeó el hospital de Médicos Sin Fronteras, después de que se le hubiera advertido que se equivocaban de blanco. Veintidos personas perdieron la vida, 12 empleados y 10 pacientes, entre los que se encontraban 3 niños. Cerca de 200 pacientes y empleados se encontraban presentes en el hospital, pero el ejército estadounidense pensaba que había talibanes entre los pacientes. Algo que se asemeja mucho a un crimen de guerra.
Es por esta razón que la doctora Joanna Liu, pediatra y presidenta internacional de Médicos Sin Fronteras, MSF, espera que este martes 3 de mayo, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas reafirme la obligación de proteger a los civiles. Que no haya ninguna justificación para atacar un hospital que funciona, un médico que trata de curar a un paciente y un paciente que está luchando por su vida en los cuidados intensivos.
“No podemos quedarnos silenciosos mientras que el espacio que rodea al trabajo humanitario sigue siendo atacado y que los cuidados médicos siguen siendo tomados como blanco”, dice por su parte Stephen Cornish, Director General de MSF Canadá.
Tout Le Monde En Parle – Joanne Liu, presidenta internacional MSF – Internet, SRC
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