Los independentistas ganaron las elecciones parlamentarias regionales en Escocia. Nicola Sturgeon, jefa del Partido Nacional Escocés (SNP por sus siglas en inglés) calificó esta elección de histórica. Esta es la tercera victoria consecutiva de su partido.
Más no obstante, al ganar 63 de los 129 escaños (contra 69 en 2011), el SNP perdió su mayoría absoluta y deberá concluir alianzas con otros partidos para gobernar. Seis parlamentarios ecologistas podrían así ser cortejados en los próximos días.
Hace 20 meses, los escoceses rechazaron el referéndum por la independencia. Desde entonces, la popularidad creciente de Nicola Sturgeon incita a algunos observadores a creer que una campaña para un nuevo referéndum podría ser lanzada otra vez.
Otros analistas consideran al contrario, que esta media victoria podría calmar las reivindicaciones independentistas del SNP, a menos que Gran Bretaña decida salir de la Unión Europea, UE, después del referéndum del 23 de junio próximo. Recordemos que muchos independentistas escoceses reivindican su pertenencia a la Unión Europea.
Otra consecuencia de estas elecciones es que la principal fuerza de oposición en Escocia es ahora conservadora. Liderados por Ruth Davidson, los conservadores tienen ahora 16 escaños más que en 2011, con 31 elegidos. El Partido Laborista, que formaba la oposición oficial en el Parlamento escocés desde 2007, sufrió su peor revés electoral de los últimos 60 años.
Los laboristas podrán seguramente consolarse si en Londres, su candidato, Sadiq Khan, favorito en los sondeos, se convierte en el primer alcalde musulmán de la capital. Otros resultados electorales se esperan este viernes en el Reino Unido.
Radio Canadá/France-Presse/Associated Press
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