En Argentina, la oposición logró hacer adoptar este jueves una ley antidespidos, pero el presidente Mauricio Macri, tiene la intención de vetarla en los próximos días. Según Página12, el presidente Macri habría dicho hace ya algunos años, cuando era alcalde de la ciudad de Buenos Aires, “Soy el jefe del veto”, al ser consultado por sus más de 100 vetos mientras gobernaba la metrópolis argentina. “Hoy, todo indica, tendrá su primer voto presidencial y será nada menos que el de la ley antidespidos, que fue aprobada en la madrugada del jueves”, escribe Página12.
Esta ley presentada por el Frente para la Victoria, FPV, de la ex presidenta Cristina Fernández, está destinada a prohibir los despidos en los sectores públicos y privados. La ley prevé que en los próximos 6 meses, un asalariado despedido puede exigir su reintegración inmediata o una indemnización de despido duplicada. La ley ya había sido aprobada por el Senado el 27 de abril y fue adoptada este jueves por la Cámara de diputados por 145 votos a favor, 3 en contra y 90 abstenciones.
Aunque minoritario en las dos cámaras del Parlamento, el presidente Mauricio Macri había logrado obtener la mayoría en los momentos claves, como a finales de marzo cuando se unió a la votación de la oposición para saldar un contencioso sobre la deuda del país, que remontaba a la crisis económica de 2001.
La aprobacion de esta ley constituye un revés para el ex alcalde de derecha de Buenos Aires y ahora presidente argentino, muy apreciado por el medio de los negocios. Mauricio Macri deberá recurrir al veto en nombre del mantenimiento de la competitividad de Argentina y no disuadir así a los inversionistas extranjeros.
Mauricio Macri se hizo elegir en diciembre de 2015 con un programa pro empresarial. Y para reactivar una economía en pérdida de velocidad, la tercera de América Latina, se comprometió en gobernar con mucho rigor. El estado redujo así su política de subsidios para las facturas de agua, de electricidad y gas, y una inflación que podría sobrepasar el 30% en 2016. Desde principios de año, decenas de miles de argentinos han perdido su trabajo y la pobreza golpea ahora a 34.5% de la población.
La ley adoptada está apoyada por las cinco centrales sindicales y algunas advirtieron ya que convocarán a una huelga nacional si el presidente se opone a la ley. “Si veta la ley va a cometer un error histórico y si es así no descartamos un paro general” dio el Secretario adjunto de Camioneros.
Los sindicatos afirman que ya se despidieron a 155.000 trabajadores desde el inicio del mandato de Mauricio Macri, empleados tanto en la administración pública como en el sector privado.
Radio Canadá/Agence France-Presse/Reuters/Página12
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