Las consecuencias de una deficiencia de vitamina D para la salud son numerosas. En la boca, una deficiencia de vitamina D afecta a los dientes y encías.
Investigadores de la Universidad de McMaster en Hamilton, Ontario, han observado signos reveladores de una deficiencia de vitamina D en los dientes removidos a cuatro franceses y a dos residentes de Quebec que murieron hace cientos de años.
Lori D’Ortenzio, estudiante de doctorado en antropología, señaló que, a diferencia de los huesos, los dientes conservan un registro permanente de las anormalidades microscópicas en la capa de dentina debajo del esmalte, que se asemeja a los anillos de un árbol.
La investigadora y sus colegas analizaron un total de 12 dientes de 4 mujeres enterradas en un cementerio francés entre 1225 y 1798, y un hombre y un niño muertos en zonas rurales de Quebec entre 1771 y 1860.
Los investigadores encontraron que todas estas personas tenían una deficiencia de vitamina D o raquitismo, que es en realidad un debilitamiento de los huesos causada por una deficiencia extrema de vitamina D.
La deficiencia de vitamina D, que se puede detectar por un análisis de sangre, se produce en la mayoría de los casos por una falta de exposición al sol, pero ciertas condiciones de salud también conducen al raquitismo, que pueden provocar deformidades óseas.
Los beneficios de sol
Los alimentos proporcionan muy poca vitamina D. La exposición a la luz solar durante 15 minutos al día cubre el 80% de las necesidades diarias.
En el caso de una dieta desequilibrada o de falta de luz solar, las vitaminas son esenciales.
La vitamina D se transforma en calcitriol, que, llevado por la sangre, actuará sobre las células. La vitamina D es entonces un precursor hormonal.
El estudio fue publicado en la revista Journal of Archaeological Science.
RCI/La Prensa canadiense/Radio Canadá
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.