Un juez en Guatemala imputó este miércoles al ex presidente Otto Pérez Molina por lavado de dinero y cohecho pasivo en un masivo caso de corrupción, por el que también serán procesadas otras 52 personas, incluidos ex ministros, empresarios y abogados acusados de desfalcar al Estado.
La Fiscalía y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un ente autónomo respaldado por la ONU y Estados Unidos, acusaron el mes pasado a Pérez Molina y a la ex vicepresidenta Roxana Baldetti de cobrar cientos de sobornos por contratos públicos durante su gobierno, entre 2012 y 2015.
Tras 27 días de audiencia en una sala abarrotada, el juez Miguel Ángel Gálvez también imputó a 53 de los 57 detenidos por el caso «Cooptación del Estado», sindicados por diferentes delitos de corrupción, desde financiamiento electoral ilícito, asociación ilícita, estafa y falsedad ideológica.
Los ex gobernantes, en prisión preventiva desde el año pasado tras renunciar debido a que fueron señalados de liderar una mafia aduanera, negaron los cargos y se abstuvieron de responder a los fiscales.
El resto de los imputados también se declaró inocente.
El magistrado fundamentó su decisión en las pruebas presentadas por la Fiscalía y la CICIG, que incluyeron testigos, comunicaciones electrónicas, registros contables y documentación de cientos de supuestos contratos ilícitos en una red donde participaban funcionarios, banqueros y particulares.
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