Equipo canadiense de fútbol en Río
Photo Credit: CBC

El estrés del éxito o la derrota de los atleta: el caso Río

Para los atletas canadienses en Río, entrenar solamente el cuerpo no es suficiente. Ellos saben que entrenar la mente puede marcar a menudo la diferencia entre el éxito y el fracaso.

Se han entrenado toda su vida para ese  momento. Su familia, sus amigos y su país los están mirando, con la esperanza de gloria. Eso puede llevarlos a sufrir un gran estrés  y  presión.  ¿Cómo hacerles frente?

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El judoka canadiense Antoine Valois-Fortier quedó fuera de la medalla olímpica en Río. Medallista de bronce en 2012, perdió contra el campeón del mundo Takanori Nagase. © CBC

Físicamente se necesita: velocidad….fuerza…. y una alta tolerancia al dolor.

Mentalmente se necesita estar en control. Por lo menos hasta que termine la competición.

Entrenar el cerebro de los atletas, entonces, de modo que puedan concentrarse en su tarea, es fundamental.

Los ejercicios de entrenamiento del cerebro que practican  los atletas olímpicos para su preparación se pueden aplicar también al resto de nosotros, dice una medallista de oro canadiense y consultora en rendimiento mental de los atletas.

La remadora Marnie McBean ganó tres medallas de oro olímpicas y una de bronce para Canadá. Sabe de qué habla. Cuando tu objetivo es ser perfecto en lo que estás haciendo, dice, si estás muy centrado en los pequeños detalles las presiones del podio desaparecen.

Los atletas deben centrarse en las pequeñas cosas que están dentro de su control, dice Marnie McBean. *Una vez que empiezas a pensar en los Juegos Olímpicos, estás perdido, porque estás pensando en las cosas grandes que no se pueden controlar.* © (CBC)

«Una vez que empiezas a pensar en los resultados, y en los Juegos Olímpicos, en las medallas, estás perdido, porque estás pensando en las cosas grandes que no puedes controlar», dijo McBean en una entrevista a CBC/Radio Canadá.

Ella dice que los atletas cometen ese error a menudo. «La forma en que puedes calmarte es pensando sólo en los detalles,  en las tareas, hay que descender y descender hacia las pequeñas cosas”.

Antes de una competición ella se calmaba centrándose en los pequeños detalles de rendimiento que sabía que podía controlar, como las tareas de la técnica.

«Para mí en el remo, eran esos pequeños detalles de los movimientos circulares de mis manos o la paleta cuando entraba y salía del agua.»

Descubrir lo que ayuda y lo que perjudica es fundamental.

Los expertos dicen que dejar afuera las distracciones y tomar el control de sus emociones es posible con la toma de conciencia de sí mismo. Estar consciente del momento presente.

Necesitan construir un fuerte sentido de auto-conciencia de lo que funciona para ellos, dice Rolf Wagschal, ex asesor del plan nacional de remadores en equipo y consultor con el Instituto canadiense del deporte de Ontario.

Penny Oleksiak ganó la medalla de plata estilo mariposa 100 m en Río © Kevin Light/CBC

En Río, el instituto apoya a la medallista de plata Penny Oleksiak y a sus compañeras del equipo de relevo Michelle Williams, Sandrine Mainville y Chantel Van Landeghem, ganadoras del bronce, así como a atletas de remo, atletismo y ciclismo.

«¿Cuáles son esas situaciones en las que están calmos y son capaces de concentrarse?» dijo Wagschal. «¿Cuáles son esas situaciones que los provocan, que los hacen sentir un poco más nerviosos y que empiezan a distraerlos? Es importante conocerse”.

Amigarse con el estrés

Para lograr un cambio, primero, tiene que darse cuenta  de que es lo que está sucediendo, dijo.

Wagschal sugiere mantener un diario para realizar un seguimiento de su estado de ánimo y de cómo se correlaciona con el rendimiento. «Es una cuestión de identificar ciertos factores desencadenantes para mejorar o evitar ese tipo de cosas.»

Rolf Wagschal, consultor con el Instituto canadiense del deporte de Ontario. © CBC

Desde un punto de vista fisiológico, señala Wagschal, la emoción y la ansiedad se exhiben de manera similar:

Tensión muscular, dolores y molestias estomacales, dificultades respiratorias, diarrea y ganas de orinar, fatiga excesiva, mareos leves, palpitaciones, sudor abundante, manos pegajosas, cosquilleo en el estómago, dolor de cabeza, boca seca, no poder parar de moverse o estar en quietud absoluta, problemas para conciliar el sueño, etc.

Desde un punto de vista sicológico:

Pensamientos negativos e interferentes, auto-diálogo negativo, focalización reducida y redundante sobre un aspecto sin tener en cuenta los demás, incapacidad para concentrarse, emociones a flor de piel, etc

El estrés es la sal de la vida

-Marnie McBean.

«Un colega mío en psicología del deporte, un consultor del rendimiento mental, dijo que no se trata necesariamente de eliminar las mariposas en el estómago, sino más bien de conseguir que vuelen en formación.»

Una vez que te das cuenta de que el estrés no es una cosa tan terrible, empiezas a usarlo mejor, dijo. «Acéptalo. Entonces, llegarás a ser como un junco en el viento.»

Y la ex medallista olímpica da un consejo que todos podemos seguir para estar mejor: no escaparle al descans.

RCI/Christine Birak /CBC/Internet

Categorías: Sociedad
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