Dejando de lado la histriónica, demagógica y alarmante campaña presidencial de Donald Trump en Estados Unidos, una oleada de payasos espeluznantes ha estado aterrando a la población a través de América del Norte.
Ellos han venido apareciendo de manera inquietante desde Nueva Escocia, en Canadá, hasta Texas en Estados Unidos.
Esta ola de payasos aterradores ha sido impulsada por la difusión de una serie de videos a través del internet y las redes sociales.
En Toronto, dos jóvenes de 15 años fueron detenidos y advertidos. Uno estaba vestido de payaso. El otro filmaba como el payaso perseguía a los estudiantes saliendo de una escuela secundaria.
En la provincia de Nueva Escocia, la policía está investigando dos amenazas contra escuelas y particulares relacionadas con los payasos, incluyendo la escuela Halifax West High School.
«En la gran mayoría de los casos en los que intervino la policía, no se encontró ninguna prueba que vincule a los payasos. Lo que estamos viendo es una combinación entre unos cuantos bromistas, junto al poder del internet y el de la mente, que amplifican esta locura de moda. En cuanto a la amenaza verdadera de que una persona pueda ser acosada por un payaso, las posibilidades son mínimas, ya que se trata más bien de una historia que se hizo viral.»
Ian Brodie, profesor de folklore en la Universidad de Cape Breton.
Lo que asusta a la población es ver a un payaso fuera de su contexto natural, que son las fiestas de niños o los circos.
Por otra parte el payaso, que es una imagen de la infancia, también representa la pérdida de la inocencia, la pérdida de la infancia, explica Ian Brodie, profesor de folklore en la Universidad de Cape Breton.
Otro elemento que explica esta serie de aparaciones de payasos tenebrosos es que vivimos en una época de miedo constante, exacerbado por los discursos políticos en circulación.
«Estamos tan guiados por el miedo. El miedo que es convertido en una fuerza política mayor, y es una de las razones por las que una persona va a votar por uno u otro candidato en Estados Unidos. No sorprende entonces que la cultura se manifieste en este tipo de temas e imágenes», dice Ian Brodie.
Engaños o no, ha habido repercusiones en la vida real ante esta extraña tendencia de payasos tenebrosos: desde la prohibición de trajes de payaso en un distrito escolar de Connecticut hasta un arresto en Georgia, donde una niña de 11 años llevó un cuchillo a la escuela para defenderse de los payasos.
Este domingo, el periódico canadiense Toronto Star, publicó un editorial que en resumen sostiene que todo el mundo merece respeto, incluso “aquellos entre nosotros con narices coloradas y zapatos de gran tamaño.”
Esta página editorial habla a menudo en favor de los marginados, los despreciados y los incomprendidos, dice el editorial del Toronto Star, que añade: queremos creer que estamos del lado de los que no están recibiendo un trato justo.
Esto es lo que nos lleva a los payasos. Al parecer, ellos son la más nueva minoría que sufre la hostilidad, el miedo y la discriminación. La llamada epidemia de «payasos espeluznantes» que comenzó en Carolina del Sur y ahora se ha extendido, según reportes, hasta Japón y Alemania, es una mala noticia para los payasos de verdad.
Las principales cadenas de tiendas están prohibiendo la venta de trajes de payaso y las personas que trabajan como payasos han informado que están perdiendo negocios.
Es hora de poner fin a una coulrofobia que no tiene fundamento (la coulrofobia es el miedo irracional a los payasos y los mimos). Todo el mundo merece respeto, incluso aquellos de nosotros con enormes narices rojas y zapatos de gran tamaño, dice finalmente el editorial del Toronto Star.
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