La relación entre Canadá y Estados Unidos se basa en valores compartidos y esperanzas y sueños compartidos, y siempre trabajaremos bien juntos *, dijo el primer ministro Justin Trudeau sobre Donald Trump cuando ganó las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Photo Credit: (Sean Kilpatrick / Canadian Press)

La extraña pareja Trudeau -Trump ¿un desastre para Canadá?

Uno es un líder feminista orgulloso de haber nombrado a la mitad de su gabinete con mujeres.  El otro llama a las mujeres que le desafían cerdas y babosas.

Un líder acoge a los refugiados sirios en su país. El otro insiste en que los enviará de vuelta porque podrían ser terroristas.

Estos son sólo dos ejemplos de las diferencias entre el enfoque político y las creencias básicas del primer ministro Justin Trudeau y el presidente electo de Estados Unidos Donald Trump.

Son tan opuestos como pueden ser dos líderes. Y, contrariamente al viejo dicho, en política los contrarios rara vez se atraen.

Trump y Trudeau tienen muy poco en común. © (Carlo Allegri, Andrew Kelly / Reuters)

Sin embargo, Trudeau tendrá que encontrar una manera de avanzar en temas críticamente importantes -como el comercio, la seguridad, el cambio climático y la política energética- con un presidente entrante con el que tiene tan poco en común, un hombre propenso a utilizar Twitter en medio de la noche para responder al más pequeño de los desaires, reales o percibidos.

La relación entre Canadá y Estados Unidos se basa en valores compartidos y esperanzas y sueños compartidos, y siempre trabajaremos bien juntos «, dijo el primer ministro a miles de jóvenes que asistieron a un evento en Ottawa el miércoles.

Trudeau llegó al poder el año pasado con la promesa de reducir los impuestos de la clase media y crear oportunidades de trabajo.  Trump, a su manera, promete lo mismo, bajando las tasas impositivas para todas las clases de ingresos y ofreciendo deducciones más altas para las familias, para el cuidado de los niños y las personas mayores.

Pero es justo allí donde cualquier semejanza termina entre el Trump  grosero, cargado de ira y el urbano y joven Trudeau.

Visones extremas

Las opiniones más extremas de Trump son bien conocidas.

Ha prometido construir un muro entre México y los Estados Unidos y hacer que México pague por ello.

Dijo que deportará a millones de inmigrantes ilegales, romperá el TLCAN y saldrá de la Asociación Transpacífica.

Y dijo que sacará a Estados Unidos del Acuerdo de París, calificando el cambio climático de un engaño creado por los chinos para socavar los negocios estadounidenses en el extranjero.

Los dos últimos, el comercio y el cambio climático, tendrán un impacto directo en Canadá si Trump cumple con sus promesas de campaña. Seguramente que ellos estarán entre los primeros asuntos que Trudeau deberá abordar cuando él y Trump se reúnan en el nuevo año.

La líder conservadora interina Rona Ambrose quiere que Trudeau entre en contacto de inmediato con Trump para presionar por una revocación de la decisión del presidente Barack Obama de rechazar el proyecto de oleoducto Keystone XL que debía transportar el petróleo desde la provincia canadiense de Alberta hasta las refinerías de petróleo en la costa del Golfo de los Estados Unidos.

Y está sobre la mesa nuevamente el negociar un nuevo acuerdo sobre la madera blanda para evitar otra guerra comercial.

Scotty Greenwood, asesora principal del Consejo Empresarial Canadiense-Americano y una de las expertas más conocedoras de las relaciones entre los dos países, dice que las diferencias entre Trump y Trudeau no deben impedir que desarrollen una relación de trabajo saludable.

«No se necesita de una relación estrecha para hacer que las cosas funcionen.»

Ella separa la retórica de la campaña que usó Trump – su promesa de romper el TLCAN, por ejemplo – de lo que hará una vez que asuma oficialmente su cargo en enero.

«Recuerde que el presidente electo no es un ideólogo, es un negociador. Sabe cuándo un contrato es bueno.  Cuando habla de desmantelar el TLC, piensa en México y la pérdida de empleos estadunidenses. No en Canadá”.

El diputado liberal Wayne Easter es copresidente canadiense del Grupo Interparlamentario Canadá-Estados Unidos. Él dice que los canadienses necesitan respirar profundamente antes de preocuparse de lo que Trump hará una vez en la Casa Blanca.

«Se va a dar cuenta rápidamente de las dificultades de gobernar y equilibrar esa nueva realidad versus los compromisos que asumió en la campaña».

Él dice que el comercio y el cambio climático serán un punto central de las reuniones entre los parlamentarios canadienses y sus homólogos en el Congreso entre ahora y enero, antes de la asunción del nuevo mandatario y más allá.

«Tenemos que trabajar en ellos para que entiendan nuestro enfoque, que es posible proteger el medio ambiente mientras se avanza en el crecimiento económico».

“Trump podría sorprender”

El parlamentario demócrata Nathan Cullen dijo que su partido instará al primer ministro a «mantener en vida los valores canadienses» en cualquier conversación con el líder político que denigró a mexicanos, musulmanes, inmigrantes, mujeres y otros grupos con fines políticos.

«Trump podría sorprender con cierta diplomacia en su carácter», dijo. «No es su fuerte, no es lo que ha llevado a que se lo elija, pero el cargo cambia a la gente, cuando la gente asume esa responsabilidad y es informada cada mañana sobre el estado del mundo y su papel en él, espero que pueda elevarse al igual que la gente que trae al gabinete.  «.

Hay preguntas sobre cuánto Trump realmente conoce sobre Canadá. Se burló del sistema de salud universal del país en uno de los debates. Asesores clave como el ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani, que ya fueron promocionados para un puesto en el gabinete, han hecho lo mismo.

El círculo íntimo de Trump, que incluye al ex alcalde de Nueva York Rudolph Giuliani, podría tener un impacto significativo en cómo gobierna. © (Jonathan Ernst / Reuters)

«¿Cuántos de ustedes han ido a Canadá para recibir tratamiento de salud?» preguntó Giuliani durante un mitin de Trump. «¿Sabes lo que es eso? Es terrible. ¡Te pones en fila y luego mueres!»

La buena noticia es que otros en el círculo íntimo de Trump conocen a Canadá. El jefe de su equipo de transición, el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, es uno de ellos.

También hay oportunidades para Canadá de reemplazar a Estados Unidos como un destino para la inversión extranjera, particularmente países a los cuales Trump les ha asestado un golpe, como México y China.

Este país también podría atraer a extranjeros talentosos que quieren venir a Norteamérica para hacer avanzar sus negocios o desarrollar sus ideas, pero que ven un Estados Unidos menos acogedor.

El lema de Trump es hacer a América Grande otra vez. El desafío de Trudeau es asegurarse de que eso no suceda a expensas de este país.

Análisis de Chris Hall, Editor de Asuntos Nacionales/CBC

Categorías: Economía, Internacional, Medioambiente y vida animal, Política, Sociedad
Etiquetas: , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.