El nuevo acuerdo de paz firmado el sábado pasado entre el gobierno colombiano y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, es final y definitivo. “No hay espacio para nueva negociación, ya lo decidimos Sergio Jaramillo y yo después de 130 horas de trabajo minucioso con las FARC (…) esto es lo que tenemos y sobre lo que hay que trabajar. No podemos perder tiempo. Hay que comenzar la implementación”, dijo Humberto de la Calle, jefe negociador del gobierno colombiano.
El documento modificado de 310 páginas presentado este lunes recoge la mayoría de las propuestas entregadas por los voceros del No, este sector se mostró de nuevo inconforme con el acuerdo negociado. “Vemos con enorme preocupación que no se hicieron muchos de los cambios sustantivos que solicitamos y que fueron determinantes para que el acuerdo inicial fuera rechazado por la mayoría de los colombianos en las urnas” afirman varios voceros del No al plebiscito.

Pero, para Humberto de la Calle, la nueva versión del acuerdo es la más completa y satisfaciente que las dos partes puedan aceptar. Esta mañana, el jefe negociador de paz del gobierno reiteró que en La Habana se acogieron el 80% de las propuestas entregadas por los voceros del No y se dieron por terminadas las negociaciones.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, destacó el nuevo acuerdo con las FARC e invitó a los voceros del No a sentarse a dialogar como se ha venido haciendo con el gobierno para que les sean expuestos los ajustes realizados al texto del acuerdo.
El ministro del Interior colombiano, indicó que el gobierno decidirá del modo de ratificación del acuerdo después de una reunión con los parlamentarios. Nada en la ley colombiana obliga al presidente Juan Manuel Santos a organizar un nuevo plebiscito y el jefe del Estado podrá contentarse esta vez con un voto del Parlamento.
RCI/Reuters/elespectador.com
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