El presidente francés, François Hollande, anunció este jueves que no buscará un segundo mandato en las elecciones presidenciales de 2017, una decisión sin precedentes que deja el camino abierto a otros candidatos de izquierda.
Es la primera vez en décadas que un presidente francés no busca la reelección. Hollande es el mandatario más impopular de la historia desde que se guardan registros de este tipo.
«Hoy soy consciente del riesgo que implicaría transitar por una ruta que no obtendría suficiente apoyo, por lo que he decidido no ser candidato en las elecciones presidenciales», dijo Hollande, con aspecto sombrío, en un discurso televisado.
Todas las encuestas recientes indicaban que ni Hollande ni ningún otro candidato socialista sobreviviría la primera ronda en las elecciones, pronosticando una segunda vuelta entre el candidato de centro-derecha François Fillon y la jefa del Frente Nacional de extrema derecha, Marine Le Pen.
La izquierda está profundamente dividida a medida que se acerca la elección. Varios socialistas, entre ellos el ex ministro de economía Arnaud Montebourg, han dicho que participarán en las primarias del partido en enero.
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