Los defensores de la criónica están esperando preservar sus cuerpos el tiempo suficiente para que la ciencia encuentre una manera de curar las condiciones que los matan - como el envejecimiento.
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El regreso de los muertos, de la ciencia ficción a la ciencia

Miles de personas en todo el mundo están invirtiendo mucho dinero para escapar de la muerte

Puede sonar a ciencia ficción, pero congelarse para que pueda vivir más tiempo es algo real.

El año pasado, una niña tailandesa de 2 años se convirtió en la persona más joven sometida a congelación criónica, preservando su cerebro momentos después de su muerte con la esperanza de que algún día pueda ser traída de vuelta a la vida. Ahora,  una niña británica de 14 años en fase terminal de cáncer obtuvo el derecho de enviar su cuerpo a los Estados Unidos después de su muerte, para que sea congelado. Ella cree que un día la ciencia le permitirá recuperar su vida a partir del momento en que terminó. ¿Ciencia o ciencia ficción?

La criónica sigue siendo bastante marginal, a pesar de que existe desde los años 60. Se trata de un principio según el cual el cuerpo humano se congela después de la muerte con la esperanza de revivir en un futuro más o menos próximo. Pero ningún ser humano regresó a la vida hasta hoy.

¿Hasta dónde llegarías para prolongar tu vida? ¿Darte más tiempo con sus seres queridos?¿Dejarías que alguien te cortara la cabeza y la congelase? © Neil McArthur)
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El profesor estadounidense de física Robert Ettinger ha desarrollado esta teoría de preservación eterna del cuerpo humano en el libro El hombre ¿es inmortal? Él mismo reposa junto  con sus dos mujeres, en el Instituto Cryonics que fundó.

Sólo otros dos institutos ofrecen servicios criónicos en el mundo, Alcor Life Extension Foundation, también en EE.UU  y KrioRus, Rusia.

¿Entierro…? ¿Incineración…? 0 criónica …?

La criónica ofrece una tercera opción después de la muerte. «En realidad, no tenemos nada que perder, dice Stephan Beauregard, del Cryonics Institute, cerca de Detroit, en Estados Unidos. Si funciona, perfecto, y para ser honesto, si no funciona, no se darán cuenta. »

Esta opción, sin embargo, requiere más preparación, ya que el cuerpo debe ser tomado a cargo tan pronto como fue declarado clínicamente muerto.

Se lo enfría y luego se lo conecta al equipo médico que mantiene la circulación sanguínea y la respiración, entre otros. Otros productos inyectados, después de la muerte, también garantizan su preservación para el transporte en uno de los tres institutos de criónica.

El Cryonics Institute sólo permite criogenizar todo el cuerpo, mientras que otras compañías ofrecen solo congelar el torso, la cabeza o el cerebro, por ejemplo. También es posible criogenizar una mascota. © Cortesía, Cryonics Institute

En Canadá, sólo la funeraria Magnus Poirier ofrece este servicio a sus clientes, ya que firmó un acuerdo con el Instituto criónica. «Somos los únicos que escuchamos a las personas que vinieron a nosotros para facilitarles este proceso», dice el vicepresidente de ventas y servicio al cliente, Patrice Chavegros.

Sólo un puñado de  canadienses fue criogenizados entre las 350 personas que han estado utilizando este método en todo el mundo. Sus cuerpos se congelan a una temperatura de – 196 ° C, en un tanque lleno de nitrógeno líquido, hasta el día que puedan ser devueltos a la vida.

«Creo que antes que nada, somos gente que aman mucho la vida. Tenemos pasión por la ciencia, la medicina y las nuevas tecnologías «, añade Stephan Beauregard. «A menudo se pone de relieve el lado especial o grotesco de la criónica,» se lamenta él también.

De la teoría a la ciencia

Keegan Macintosh es el primer canadiense que ha firmado un contrato con la Sociedad Lifespan de Columbia Británica para preservar criogénicamente su cuerpo después de la muerte. © (Sociedad de la Vida de B.C.)

La criopreservación, que se basa en la criónica ya hizo sus pruebas en la comunidad científica. Las células o tejidos en su conjunto se mantienen a una temperatura muy baja, como el semen, la sangre y el tejido de los ovarios.

La ciencia también ha ayudado a perfeccionar el método, sobre todo a través de  la vitrificación. Desarrollado en la década de 2000, este proceso, similar al anticongelante, protege contra el daño causado por el frío extremo que de otro modo haría imposible una reparación.

La criónica también adoptó este enfoque con el fin de preservar mejor el cuerpo, dispuesto cabeza abajo en tanques de nitrógeno líquido. Pero la ficción sigue siendo superior a la realidad, según la profesora de la Universidad de Laval, Janice Bailey. «Ni siquiera podemos hacer la criopreservación de muchas otras células simples», dice la especialista en ciencias de los animales, la agricultura y la alimentación.

De la ciencia a la ciencia ficción

Una diferencia importante opone también la criopreservación y la criocongelación: la vida y la muerte.

Con la criopreservación, «tratamos de resucitar a las células vivas, explica Janice Bailey. Un cuerpo entero es hipercomplejo «y requiere que los daños causados por el frío extremo sean mínimos o reparables.

Janice Bailey, profesora de la Universidad de Laval, © U de Laval

La criónica plantea también el problema de la muerte. «Tratar de descongelar el cuerpo humano es una cosa, pero volverlo a la vida más tarde, es algo extremo», recuerda. Sin contar que también  hay que ser capaz de curar la enfermedad que causó la muerte, o encontrar el secreto de la inmortalidad en caso de que la persona crionizada sea mayor.

¿Quién sabe lo que depara en el futuro? Pero hoy está tan lejos de nuestra realidad.

– Janice Bailey, profesora de la Universidad Laval

¿Vender un sueño?

Stephan Beauregard, del Cryonics Institute, asegura que todos los clientes que usan este método saben que las posibilidades de volver a la vida son débiles en la actualidad. «No somos locos, añade. Sin embargo, muchas cosas en el pasado se están convirtiendo en realidad, y muy a menudo, eso ocurre  en la ciencia ficción. »

«Así que no tenemos absolutamente nada que perder con intentarlo,» dijo el hombre originario de Quebec.

Intentarlo, sin embargo, puede resultar oneroso. Cuesta entre $ 30.000 a $ 200.000 ser congelado criogénicamente, dependiendo de la empresa elegida.

Los costos no son muy diferentes de los arreglos funerarios tradicionales. Estos también pueden ser pagados en varias fracciones antes de morir. Incluso los clientes que cambien de idea en vida podrán ser reembolsados por Cryonics Institute, asegura Stephan Beauregard.

La aventura aún no es legal en algunos países (Francia la prohíbe, por ejemplo) y bajo ciertas condiciones. Un ser humano no podría ser congelado criogénicamente vivo.

Stephan Beauregard, del Cryonics Institute ©  Cortesía Cryonics Institute

La vida y muerte según Alcor

*Alcor asegura que su operación es «un experimento en el sentido más literal de la palabra». No promete una segunda oportunidad de vida, pero afirma que la criónica es «un esfuerzo para salvar vidas».

*Dice que «la muerte real» sólo ocurre cuando un cuerpo que se está muriendo comienza a dejar de funcionar y sus compuestos químicos se vuelven «tan desorganizados» que la tecnología médica ya no puede restaurarlos. La futura tecnología podría hacer más posible que ese proceso sea revertido.

*Momentos después de que un cliente es declarado legalmente muerto, el cuerpo es colocado en soporte vital artificial, y la sangre se reemplaza con conservantes para transportarlo desde cualquier parte del mundo hacia la sede de Alcor.

*El cuerpo se llena de químicos llamados «crioprotectores», que enfrían a las células a -120ºC sin que se forme hielo, un proceso llamado vitrificación.

El cuerpo después es enfriado más hasta los -196ºC y almacenado indefinidamente en nitrógeno líquido.

Fuente: Fundación de Extensión de Vida Alcor

La realidad

Aunque la parte de congelación es una cosa real, ser traído de vuelta al mundo todavía es cosa de la ciencia ficción.

La ciencia todavía tiene que descubrir una manera de reanimar a una persona. La solución en el cuerpo es tóxica y tendría que ser eliminada por completo para evitar, así, morir otra vez.

También hay preocupación por el cerebro, en particular, no se puede saber en absoluto si será capaz de sobrevivir el proceso.

RCI/CBC/Radio Canadá/Internet

Categorías: Internacional, Salud
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