Imagínese en la playa después de un día estresante, incluso en pleno invierno canadiense. Con la realidad virtual, es posible sentirse como si estuviera en medio de cualquier entorno que esté viendo, sin importar dónde se encuentre. Investigadores canadienses están estudiando ahora las formas en que la realidad virtual puede ir más allá de juegos y entretenimientos y ayudar a la gente con trastorno de ansiedad.
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Los trastornos de ansiedad se han establecido como uno de los problemas mentales más frecuentes entre la población. Según recientes estudios epidemiológicos su tasa de prevalencia se sitúa alrededor del 31% o, dicho de otro modo, prácticamente una de cada tres personas tiene o tendrá en algún momento de su vida un cuadro de este tipo.
Se trata entonces de un serio problema de salud pública.
Amanda Chodak es una estudiante de psicología en la ciudad de Calgary que se siente un poco estresada por la típica carga de trabajo al final del semestre. Ella decidió participar de una investigación para determinar su nivel de ansiedad.
Ella es una entre los más de 80 participantes en un estudio que llevan a cabo el estudiante Josh Stewart y su supervisor, el profesor Anthony Chaston de la Universidad Mount Royal , sobre el potencial de la realidad virtual para aliviar la ansiedad.
Stewart y Chaston miden el estrés haciendo que los voluntarios llenen un cuestionario en línea antes de ponerse las gafas.
«Me siento a gusto», «estoy preocupada» y «estoy segura de mí misma» estaban entre las declaraciones de Chodak que tuvo que calificar con respuestas que van desde «nada» a «mucho más».
Anthony Chaston es profesor de Psicología en la Universidad Mount Royal y dirige la investigación.
«Aquí podemos medir la ansiedad justo antes y después de la experiencia para ver si la experiencia está disminuyendo la ansiedad que están sintiendo»
La experiencia es la realidad virtual.
Lo realmente innovador es el uso de un entorno inmersivo usando la realidad virtual que logra unos resultados imposibles de obtener por otros métodos que no nos alejan de nuestra realidad y del dolor que hay en ella.
Las gafas especiales y el video, le permitirán a Chodak dejar atrás sus preocupaciones y el invierno.
«Veo a la gente tirada sobre una manta y hay otras personas de pie con globos».
A pesar de que está de pie en una habitación en la Universidad de Mount Royal ella está visitando la playa Zuma en California.
Lo que Chodak está experimentando es muy diferente a ver videos de una playa.
Esta es una experiencia en 3-D. Está dentro de ella. Es como que una podría llegar y ayudar a la mujer a doblar su silla en la playa.
¿Qué es lo que sucede realmente?
Esta es la explicación.
Cuanto más presente esté en su entorno de realidad virtual menos presente estará en el lugar donde está sufriendo estrés.
El estudio medirá hasta qué punto los entornos de realidad virtual pueden reducir la ansiedad en las personas.
Un médico visionario
La visión de Anthony Chaston sobre la tecnología realidad virtual es la de ayudar a las personas que están enfermas.
También quiere llevar la experiencia al siguiente nivel, que permita a la gente realizar tareas pequeñas dentro de los mundos que visitan.
«Nos gustaría llevar esto a los pacientes, fuera y dentro de los hospitales. Imagine que tiene un niño en el hospital durante un mes. Sería genial si pudiéramos enviarlo una pequeña hora de safari en África, donde podría tomar fotografías de ese entorno cuando esté allí, publicarlas en su Facebook, compartirlas con sus amigos».
Eso todavía está lejos.
Chaston y Stewart tendrán más estudiantes para probar después de las vacaciones y más resultados para analizar.
Pero lo que han encontrado ya es prometedor.
Después de terminar su gira de realidad virtual, , los estudiantes llenan otro cuestionario en línea sobre la ansiedad. Sus respuestas se comparan con la primera que habían completado antes de colocarse las gafas.
A declaraciones como «Me siento nerviosa», «Me siento confundida», y «Me siento ansiosa», Chodak sin vacilar seleccionó la opción «en absoluto».
Sí, definitivamente sentí que después de estar en el ambiente sereno de las playas y en medio de las olas , todo el estrés que tenía se había ido completamente.
Una muy buena señal sobre los potenciales poderes de reducción de la ansiedad que tiene un viaje rápido a la playa.
Identificar los síntomas de ansiedad
- Trastorno de pánico con/sin agorafobia.
- Trastorno de ansiedad generalizada.
- Fobia social.
- Fobias simples (por ej.: fobia a volar, acrofobia, fobia a la sangre, etc.)
- Trastorno obsesivo-compulsivo.
- Trastorno por estrés postraumático.
RCI/Carolyn Dunn,CBC/Internet
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