Vandalismo y violencia en el estado Espirito Santo de Brasil, durante huelga de la policía.

Vandalismo y violencia en el estado Espirito Santo de Brasil, durante huelga de la policía.
Photo Credit: AFP

Ola de violencia en el estado de Espirito Santo, Brasil

La intervención del ejército permitió este martes un regreso relativo a la calma en el estado de Espirito Santo, sudeste de Brasil, sacudido por una ola de violencia engendrada por la huelga de los policías, actualmente en curso desde el fin de semana.

La circulación de los buses se reanudó este martes en la calles de la capital, Vitoria, gracias a la presencia de los militares para garantizar la seguridad de los terminales de buses, dijo en entrevista con la AFP un portavoz de este estado de 3.6 millones de habitantes.

Según la misma fuente, 200 militares de regimientos locales y otros 200 de la Fuerza Nacional, enviados especialmente por el gobierno federal, empezaron a patrullar las calles desde el lunes por la noche. Otros 800 militares y bomberos son esperados como refuerzo.  Pero a pesar de la presencia militar, la mayoría de los comercios siguen cerrados. Las escuelas también siguen cerradas.

Desde el inicio de la huelga, se cuentan 68 muertes violentas en el estado de Espirito Santo, según las cifras del Sindicato de policías, Sindipol. Esta información no ha sido confirmada todavía de forma oficial.

La huelga de la policía comenzó el sábado por la noche y miembros de sus familias bloquearon el acceso a las comisarías para pedir un aumento de sueldo y mejores condiciones de trabajo para los agentes, que oficialmente no tienen derecho a manifestar.

Aprovechando la ausencia de las patrullas, las agresiones, los actos de vandalismo -con el saqueo de tiendas y almacenes y varios buses incendiados- y los asesinatos se multiplicaron inmediatamente.

RCI/AFP

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