Des enfants autochtones

Niños indígenas
Photo Credit: RADIO-CANADA

Pedofilia en comunidades indígenas, poder político y corrupción policial

Las que se atreven a denunciar la pedofilia que afecta a las comunidades indígenas se enfrentan a obstáculos significativos. Sus presuntos autores son parientes y,  muchas veces, los mismos líderes. La policía aborigen, es reacia a investigar. El programa Enquête de Radio Canadá entrevistó a mujeres de las Primeras Naciones de Quebec que se atreven a denunciar la pedofilia que afecta a las comunidades indígenas y los  obstáculos a los que se ven confrontadas al hacerlo.

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Nicole presentó una demanda contra un ex jefe de la policía atikamekw © Radio Canadá

Niñas y niños abusados sexualmente en sus comunidades. Se dice que ya es una epidemia. Algunos de esos predadores son jefes indígenas. La policía aborigen los protege. Reina una cultura del silencio impuesta además por los propios miembros de las comunidades en nombre de la sacrosanta unidad familiar. ¿Cree que esto ocurre en algún país lejano de América latina o de África? Absolutamente no. Esto pasa en Canadá.

Cuando una mujer en la comunidad Innu de Uashat-Maliotenam, en la Costa Norte, en la provincia Quebec, quería denunciar la pedofilia del jefe Mike McKenzie, la policía aborigen se negó a investigar.

«La policía indígena no quiso tomar mi queja porque es el jefe en este momento», dice. Los abusos habrían  comenzado cuando ella acababa de celebrar sus 13 años. Él tenía 26.

Me daba drogas, me hacía beber. Pero a cambio, quería que le de sexo todo el tiempo.

-mujer innu que pidió no revelar su nombre.

Lise Jordan, una de sus amigas, protestó contra esta situación. «¿Cuál es el mensaje que recibe nuestra comunidad? No toques al jefe, pero ¿puedes tocar a un niño de 12 años? Los niños son sagrados! »

Los indígenas  de Quebec estiman que hasta el 70% de ellos habrían sufrido abuso sexual. Más de la mitad de los abusos reportados concernía a niños menores de 14 años.

La policía indígena … ¿una policía política?

¿Dónde acudir cuando el presunto agresor es un líder de la comunidad?

En Quebec, la policía indígena es una policía local que depende  del Consejo de banda, a excepción de los Cree y los Inuit, que han establecido una policía regional.

En resumen, una policía sujeta a caprichos políticos del jefe y de los concejales. «Siempre será un policía local, una policía politizada», explica Maurice Tassé, un ex oficial de policía de Quebec, que ya ha dirigido la policía regional amerindia.

La policía de la comunidad Innu de Uashat-Maliotenam © Radio Canada

Todas las preguntas que se le plantearon al Servicio de Policía Uashat-Maliotenam fueron enviadas sistemáticamente al Consejo de la banda, que se ha comprometido a responder a las preguntas de Radio Canadá.

Su director general, sin embargo no se presentó a las dos citas que él había propuesto, sin ninguna explicación.

Para hacer que su denuncia avance, la mujer que quería presentar una queja contra Mike McKenzie tuvo que recurrir a la Sûreté du Québec (SQ), la Policía de Quebec. Finalmente, fue acusado en junio de 2016 de asalto sexual contra un niño menor de 14 años.

Tras las acusaciones, el jefe McKenzie se retiró de su cargo por dos meses antes de regresar a su puesto, señalando que fue elegido democráticamente.

La investigación preliminar del caso se inició el 17 de febrero.

¿Una policía incompetente?

El trabajo de los servicios de la policía indígena, sobre todo en el caso de las investigaciones sobre las denuncias de abuso sexual también plantea muchas preguntas.

Jenny, otra mujer de la comunidad de Uashat-Maliotenam, presentó cuatro denuncias de agresiones sexuales presuntamente cometidos contra su hijo de 5 años.

Finalmente, la policía interrogó su hijo. Sin embargo, el interrogatorio se hizo en francés… y no en innu, su lengua materna. El policía no hablaba Innu

A la madre también le dijeron que el kit de pruebas que se preparó en el hospital, se habría perdido.

La investigación de Radio Canadá  demuestra que el hospital se lo entregó  al servicio de policía aborigen el mismo día. Pero ésta nunca lo envió al laboratorio de ciencias judiciales y de medicina legal de Montreal. En consecuencia, ningún análisis fue efectuado.

Todas las solicitudes de Radio Canadá a la policía indígena quedaron sin respuesta.

Jenny cree que la policía de Quebec hubiera hecho un mejor trabajo

Jenny cree que la policía de Quebec hubiera hecho un mejor trabajo.  «Creo que ese es el error que hice en ir a ellos. Debería haber ido a la Policía de Quebec, creo. »

El Ministro de Seguridad Pública, consciente de esta historia, acaba de iniciar una investigación sobre la ética policial.

No se presentaron cargos contra el presunto agresor, que siempre se pasea  en la comunidad. Los fiscales decidieron no presentar cargos debido a la «joven edad » del niño y sus «dificultades en relatar los hechos y de su confusión frente a  los acontecimientos.»

Nadie quiere ser policía indígena

Este año, ninguna persona aborigen se inscribió en la Academia Nacional de Policía, situada en Nicolet, en Quebec. La falta de estudiantes aborígenes es tal que la policía contrata a blancos que no conocen ni el idioma ni la cultura de las comunidades atendidas.

Para acceder a la academia de policía, un requisito para convertirse en un agente de policía, los aborígenes tienen que pagar tres veces más que los blancos: 27,000 dólares en lugar de  8,000.

Y para convertirse en investigador de casos de abuso sexual, los cursos cuestan $ 2.716 para un policía aborigen, $ 1.500 para los demás.

¿La razón de esta discrepancia? la policía aborigen no financia la Escuela Nacional, a diferencia de otros cuerpos de policía en Quebec.

Abuso y escuelas residenciales

Nicole, otra mujer aborigen, presentó una demanda contra un ex jefe de la policía Atikamekw que la agredió durante  años, desde los 5 años.

Y ella no es la única. Durante 40 años, Jean-Paul Neashish pudo abusar de mujeres y niñas con total impunidad.

Nicole sabe que los que frecuentaron  las escuelas residenciales, como Jean-Paul Neashish, han sufrido. Pero no se explica por qué algunas de esas víctimas se convirtieron en abusadores.

Sí, es verdad, que sufrieron ellos también.  Pero ¿por qué continuaron haciendo sufrir a los demás?

-Nicole

Llevó 10 largos años antes de que se condene al agresor. Mientras tanto Nicole se exilió primero en La Tuque y luego en Trois-Rivières, todas localidades en Quebec.

Romper el ciclo de violencia

El círculo vicioso de la violencia se debe especialmente al racismo sistémico que se materializó, entre otros, con las escuelas residenciales y los abusos que se cometieron allí. Los daños fueron transmitidos de una generación a otra: abuso, violencia así como falta de habilidades parentales.

Hoy los líderes jóvenes se dan cuenta de la magnitud del problema y la necesidad de acabar con éste.

El gran jefe de la nación Atikamekw, Constant Awashish © Radio Canada

El gran jefe de la nación Atikamekw, Constant Awashish, anima a la gente a denunciar el abuso sexual para deshacerse de su sufrimiento y también para romper la barrera de la victimización.

Hay que encontrar una manera de curar a nuestra gente, porque no podemos arrastrar eso por tanto tiempo. No podemos pasarlo a nuestra juventud. No podemos transmitirlo a las generaciones futuras. Es necesario que el ciclo se detenga ahora.

-Constant Awashish, gran jefe Atikamekw

Jenny, cuyos padres también fueron víctimas de abuso, se da cuenta de que su hijo necesita ayuda para romper este círculo vicioso.

«Hay muchos que se han guardado eso mucho tiempo: 40 años, 60 años. Hoy te das cuenta el daño que ha hecho. No sólo ha herido a esa persona, ha herido a sus hijos. Sus nietos han sufrido de este problema. No quiero que mi hijo pase por esto toda su vida. Si se necesita ayudar, hay que hacerlo hoy, no 40 años más tarde «, dice Jenny.

Pero la ayuda es escasa. «Los psicólogos especializados en abuso sexual en las comunidades aborígenes en Quebec son escasos», dice la psicóloga Danielle Descent, que trabaja con los Innu.

Reacciones a la investigación de Radio Canadá

Después de la difusión  del reportaje  el 16 de febrero sobre el ciclo de abuso experimentado en algunas comunidades de las Primeras Naciones de Quebec, el jefe de la Asamblea de las Primeras Naciones Quebec- Labrador (AFNQL), Ghislain Picard, destacó el inmenso valor de todas las víctimas que denunciaron la violencia que han sufrido.

“Al igual que nuestros hermanos y hermanas que son víctimas de este tipo de delitos, ellas se hicieron cargo de su sufrimiento para cambiar su realidad camuflada y para proteger a nuestros hijos y las generaciones futuras de tales atrocidades. Tomemos el ejemplo de su valor”.

Por su parte, la presidenta de Mujeres Nativas de Quebec, Viviane Michel, señaló que los casos evocados de abuso sexual en el informe de Radio Canadá están lejos de ser aislados.

«Cada vez que voy a las comunidades, me reportan casos de abuso sexual», dijo Viviane Michel.

Añadió que es necesario que la policía indígena en las reservas sea independiente del Consejo de banda  que le solicita la investigación.

RCI/ Anne Panasuk –Radio Canadá

Categorías: Indígenas, Política
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