Con niveles de agua que siguen aumentando, se ha desplegado un gran contingente militar en la vasta zona inundada para ayudar a los residentes exhaustos, después de las intensas lluvias que han caído en las últimas semanas.
La provincia de Quebec ha sido duramente golpeada por las inundaciones con cerca de 2.500 residencias inundadas en unos 146 municipios que van desde la frontera con la provincia de Ontario en el oeste hasta la península de Gaspé enel noreste. Un poco más de 1.500 residentes fueron evacuados en la mitad de la ciudad de Gatineau. Estas evacuaciones se han hecho prácticamente contra el parecer de las personas debido al estado de emergencia decretado en decenas de ciudades, donde se abrieron centros de albergue.
El ministro del Medioambiente de Quebec, David Heurtel dijo este lunes que se trata de una inundación histórica, resultado de un invierno más duro que de costumbre, seguido por las intensas lluvias de los meses de abril y mayo.
El ministro Heurtel dijo además que habían “señales alentadoras” en la región de Outaouais, donde los niveles de agua siguen aumentado pero mucho más lentamente. Por su parte, el ministro de Seguridad Pública de Quebec, Martin Coiteux, afirma que se espera que las inundaciones lleguen a su nivel máximo en estos días y que comiencen a retroceder a mediados de la semana.
Las inundaciones han dejado a miles de damnificados, escuelas y edificios públicos cerrados. El balance de las inundaciones en la mitad del este de Canadá se agravó este lunes, pero las autoridades afirman que los niveles de inundación actual se van a estabilizar antes de que la crecida comience a bajar.
El ejército fue desplegado y participa en “el refuerzo preventivo de los diques”, pero también participa en estaciones de tratamiento de agua potable y en la solidificación de puentes. El general Hercule Gosselin anunció el despliegue suplementario de militares, lo cual llevaría a “1.650 soldados que participan en el apoyo directo a las operaciones de seguridad civil”.
Ralph Goodale, ministro federal de Seguridad Pública, habló este lunes de las “lluvias más importantes de los últimos 50 años». En la provincia de Ontario la situación es crítica en alrededor del Lago Ontario (uno de los 5 grandes lagos). Vigilamos atentamente los acontecimientos en las provincias de Nueva Brunswick y el este de Quebec, donde todavía persiste la lluvia, dice el ministro Goodale.
El mal tiempo también golpeó la costa pacífica canadiense, donde se produjo un deslizamiento de tierra cerca de Kelowna, Columbia Británica, y se teme por la vida de dos hombres que fueron declarados desaparecidos. El estado de emergencia fue declarado en el sur de esta provincia.
En Quebec, un buen número de escuelas permanecieron cerradas este lunes, así como algunos edificios públicos y centros de salud en la ciudad de Gatineau. La Universidad McGill de Montreal canceló “todos los cursos y exámenes previstos” debido a la dificultad para los profesores y estudiantes en llegar al campus por los problemas de circulación ocasionados por las inundaciones. Más de 400 carreteras están bloqueadas en toda la provincia.
RCI/Radio Canadá/Canadian Press/AFP
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