Hasta mediados del año 2016 aproximadamente, la inteligencia artificial era ya parte de la gestión de artículos científicos relacionados con cualquier patología, el análisis y posterior reconocimiento de enfermedades de la piel a través de una cámara de un dispositivo móvil, la mejora de los diagnósticos en general entre otros. Según un artículo de la agencia ANSA referido a un estudio publicado en la revista de ciencia y tecnología Spectrum, la medicina es una de las áreas privilegiadas por las grandes firmas tecnológicas que trabajan en proyectos de inteligencia artificial a la que se le puede “enseñar“ a ser más eficaces que los médicos, sobre todo en lo que atañe a diagnóstico temprano de enfermedades. Este artículo científico apuntó a ciertos proyectos que fueron dados a conocer en los últimos días que tienen como protagonistas a las empresas IBM e Intel.
La reconocida empresa multinacional de tecnología y consultoría IBM, fue siempre asociada a la fabricación y comercialización de hardware y software para ordenadores y con el tiempo fue sembrando elementos que le dieron entrada en servicio de infraestructura y consultoría relacionada con la informática en todos sus aspectos, inclusive en nanotecnología e inteligencia artificial. Su proyecto de IA conocido como “Watson”, es un sistema informático que responde a preguntas en lenguaje natural gracias a una gran base de datos almacenada de manera local, alimentada por enciclopedias, diccionarios, artículos de noticias, obras literarias y bases de datos externas. Este sistema, afirma el artículo, ya ingresó de modo estable en las salas de hospitalarias. Watson fue creado dentro de un proyecto de dos millones de dólares y según los testeos, sería capaz de anticipar en dos años los diagnósticos de insuficiencia cardíaca respecto de los métodos tradicionales. En este caso, el algoritmo toma como referencia la base de datos creada con información recogida durante las visitas médicas.

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Jianying Hu, uno de los investigadores del proyecto, asegura que “se descubrió que a partir de diagnósticos de otras enfermedades, fármacos prescriptos y registros médicos de eventuales admisiones a los hospitales, y en ese orden, pueden proporcionar algunas señales capaces de predecir la enfermedad usando el lenguaje discursivo”.
Según el informe, otra de las empresas, la corporación Intel, reconocida mundialmente por ser el mayor fabricante de circuitos integrados del mundo, se centralizará en tumores pulmonares. El gigante de los microprocesadores conjuntamente con Alibaba Group y otros socios, lanzaron un concurso para desarrollar un algoritmo capaz de leer e interpretar las radiografía y otra serie de datos médicos y de esa manera anticipar diagnósticos y llevar un seguimiento pormenorizado de la evolución de tumores ya instalados. En este caso, la intervención de la IA también podría ser utilizada para predecir efectos colaterales de un fármaco utilizado para el tratamiento. Esta posibilidad fue corroborada por un estudio hecho por la Universidad de Stanford, publicado en la prestigiosa revista científica “ASC Central Science”. Con el análisis de información mínima sobre la conformación del medicamento, se podría realizar una predicción de la potencial toxicidad o sobre la inestabilidad de las moléculas, imprescindible para su desarrollo.
En definitiva, la Inteligencia Artificial nos acerca cada vez más al futuro, y en ese acercamiento, la medicina se transforma en un campo fértil para las grandes tecnológicas. Solo falta esperar para ver en vivo y en directo, la aplicación de estas revoluciones para el beneficio de la humanidad.
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