La temporada de incendio comenzó de manera dramática en Columbia Británica, en la costa oeste canadiense.
Diversos focos de fuego afectan a la provincia canadiense, obligando a la evacuación de pobladores en un número que ya ronda las 10.000 personas y obligando a las autoridades a declarar la situación de emergencia.
El fin de semana las autoridades contabilizaron 220 incendios forestales, con la región central del territorio provincial siendo la más afectada.
Miles de kilómetros cuadrados de bosques han sido afectados y en algunos casos la destrucción es total, ya que las llamas carbonizaron con velocidad inusitada la vegetación.

El pronóstico meteorológico no es alentador para los locales, ya que las previsiones anuncian que las temperaturas elevadas seguirán durante los próximos días, acompañadas por la falta de humedad, y con vientos intensos soplando en la región, lo que ayudaría a que el fuego se siga expandiendo.
El gobierno provincial puso a disposición de las víctimas un fondo de 100 millones de dólares, con el objetivo de ayudar a los trabajos de reconstrucción necesarios.
Numerosos pobladores debieron dejar sus viviendas casi con lo puesto, ante la ferocidad de las llamas y miles de ellos esperan aún que los bomberos controlen el siniestro y les permitan retornar a sus hogares, para evaluar el alcance de los daños ocurridos.
La primera ministra saliente, Christy Clark, anunció que una suma de 600 dólares estará disponible de inmediato, por medio de la Cruz Roja, para que los desplazados puedan hacer frente a los gastos más urgentes.

Los equipos de urgencia combaten por aire y tierra las llamas fuera de control, aunque su trabajo se ve complicado por las condiciones climáticas.
Sin embargo, las autoridades sostuvieron a primera hora del lunes que las brigadas habían logrado extinguir varios de los focos.
Las zonas más afectadas son las del centro y sur provincial, en una franja que se extiende por cerca de 500 kilómetros. El norte también es afectado, aunque por el momento las llamas no constituyen un riesgo inminente para los habitantes.
El gobierno federal anunció que aprobó una ayuda para combatir el siniestro, luego de haber recibido un pedido de sus pares provinciales en ese sentido.

Los fuegos más violentos obligaron a la evacuación de las localidades de Ashcroft, Cache Creek, Alexis Creek y varios sitios a lo largo de la ruta provincial 97.
La mayoría de los evacuados pertenece al distrito regional de Cariboo.
El alcalde de Cache Creek, John Ranta, dijo que las llamas destruyeron decenas de edificios, entre viviendas, casas móviles y dos hangares pertenecientes al aeropuerto regional.
Por su parte, Cliff Chapman, responsable de Centro de Incendios de Kamloops, estimó que la situación planteada el sábado último no tenía precedentes, debido a la intensidad y voracidad del fuego.
Cada año, diversas regiones de Canadá se enfrentan a la aparición de incendios forestales, que hasta hace poco tiempo las cuadrillas de bomberos parecían poder controlar de manera relativamente fácil y efectiva.

En los últimos tiempos, las llamas parecen haber ganado en violencia, gracias en parte a las condiciones climáticas de sequía y calor extremo.
Hace poco más de un año, en mayo de 2016, la localidad de Fort McMurray, en Alberta, conoció uno de los incendios forestales más violentos y devastadores en la historia del país. En la ocasión, más de 80 mil personas debieron huir de las llamas, que destruyeron 2.400 viviendas y cerca de 600 mil hectáreas de bosques.
Precisamente, varios de los damnificados de Fort McMurray decidieron devolver los gestos de solidaridad que recibieron durante esa tragedia y el fin de semana se dedicaron a organizar la colecta de donaciones de alimentos e insumos básicos, para hacerlos llegar a Columbia Británica.
Mientras tanto, en Columbia Británica se espera la llegada de refuerzos de los cuerpos de bomberos de Alberta, Saskatchewan y Ontario, para poder combatir las llamas con mayor efectividad y evitar la progresión de las mismas.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.