El tribunal de primera instancia emite sentencias de referencia sobre el proceso de consulta con los pueblos indígenas sobre proyectos energéticos
La Corte Suprema de Canadá ha anulado los planes de pruebas sísmicas en el territorio de Nunavut, otorgándole una gran victoria a los inuit que argumentaron que no fueron consultados adecuadamente antes de que la Junta Nacional de Energía, NEB por sus siglas en inglés, diera luz verde a las compañías petroleras para llevar a cabo pruebas disruptivas.
En una decisión unánime emitida el miércoles, escrita por los jueces Karakatsanis y Brown, el tribunal de primera instancia sostuvo que el proceso de consulta de la NEB con el Clyde River Inuit estaba «profundamente viciado» y dio poca o ninguna consideración a los derechos de los Inuit y su dependencia de los mamíferos marinos de la zona para su subsistencia.
Los Inuit han argumentado que la tecnología de onda sonora que un consorcio noruego buscaba usar en busca de petróleo habría impactado profundamente en la vida marina en la zona.
En una decisión similar emitida el miércoles, el tribunal superior decidió por unanimidad que Enbridge podría proceder con su inversión del oleoducto de la Línea 9 en el suroeste de Ontario, argumentando que los Chippewas del Thames recibieron suficiente información antes de la construcción del proyecto.
La corte envió un mensaje a través de su sentencia, advirtiendo a los proponentes de la NEB y del proyecto energético que «cualquier decisión que afecte a los derechos o tratados aborígenes, sobre la base de una consulta inadecuada, no cumplirá con el deber de consultar».
CBC
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