La transnacional petrolera TransCanada decidió cancelar sus planes de construcción de oleoductos Energy East y Eastern Mainline que estaban destinados a transportar el petróleo altamente contaminante de las arenas bituminosas de Alberta hacia las provincias de Quebec y Nueva Brunswick.
La compañía, con sede en Calgary, anunció el mes pasado su decisión de suspender sus gestiones para obtener las aprobaciones reglamentarias para llevar adelante estos proyectos.
«Después de una cuidadosa revisión de las circunstancias… informaremos a la Junta Nacional de Energía que ya no llevaremos adelante nuestros proyectos Energy East y Eastern Mainline», dijo el presidente de TransCanada, Russ Girling, en un comunicado.
Girling agregó que TransCanada también se retirará de la evaluación medioambiental en la provincia de Quebec.
Energy East tenía planeado transportar la producción de las arenas bituminosas de Alberta hasta las instalaciones petroleras de la Irving Oil en Saint John, en la provincia marítima de Nueva Brunswick.
Los defensores de este polémico proyecto sostenían que el proyecto Energy East era necesario para expandir los mercados para el petróleo de Alberta y reducir su dependencia de las exportaciones hacia Estados Unidos.
Los opositores a este proyecto llevaron a cabo una campaña explicando las nefastas consecuencias para el medioambiente y el riesgo de un derrame para la población.
El primer ministro de Nuevo Brunswick, Brian Gallant, expresó su decepción ante la cancelación de los oleoductos y dijo que cree que la decisión de cancelar el proyecto se debe a cambios recientes en las condiciones del mercado mundial y a la caída de los precios del petróleo.
Por su parte, el alcalde de Montreal, Denis Coderre, celebró este jueves el anuncio de la cancelación del proyecto, indicando en una serie de mensajes en las redes sociales que fueron grupos de ciudadanos y políticos locales de la región de Montreal quienes jugaron un rol clave para poner fin a ese proyecto.
Coderre, junto a numerosos electos municipales, sostuvo que los riesgos medioambientales que representaba ese oleoducto superaban ampliamente los potenciales beneficios económicos.
Coderre también agradeció a las organizaciones indígenas locales por su liderazgo en la lucha contra la construcción de esos oleoductos.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.