El ministro español de Justicia, Rafael Catalá, justificó este martes el encarcelamiento de dos líderes del movimiento secesionista catalán, ocurrido el lunes, argumentando que fue una decisión judicial basada en la comisión de un delito y no un asunto político.
Catalá defendió las pruebas de un supuesto delito de sedición contra los líderes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Ómnium, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, cuyo envío a prisión generará una mayor tensión social en la región, donde el martes están convocadas varias protestas.

“Presos políticos no (son), porque la prisión decretada ayer tiene que ver con la comisión de un delito (…) es intolerable y no deberíamos plantearnos ninguna duda sobre que porque la justicia funciona vaya a haber disturbios sociales”, dijo Catalá en Madrid.
Destacando la “prudencia, moderación y absoluta firmeza” del gobierno encabezado por Rajoy ante la crisis catalana, pese a la violencia de la policía contra la población el día del referéndum, el ministro español de Justicia dijo que Madrid tenía tendida la mano al gobierno regional para resolver el conflicto “de la manera más estable y equilibrada”.
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.