El submarino argentino San Juan no ha dado más señales de vida desde hace 6 días, cuando desapareció en las aguas del Océano Atlántico, en un viaje que estaba programado.
Hasta el momento, las autoridades argentinas no han sido capaces de encontrar la embarcación y la búsqueda prosigue a lo largo de la extensa costa del país, al tiempo que se incrementan los temores por las posibilidades de supervivencia de los 44 tripulantes del sumergible.
La jornada del lunes 20 de noviembre será recordada como particularmente dolorosa para los familiares de los embarcados.
Dos informaciones falsas sobre señales provenientes del navío habían reavivado la confianza de un pronto rescate de la tripulación. Pero los expertos determinaron que los ruidos que habían sido confundidos con mensajes provenientes del San Juan, no habían sido originados por el mismo.
“La huella sonora no corresponde con la de un submarino”, sostuvo un portavoz de la armada, quien agregó que sólo podría tratarse de “ruidos biológicos”.
En cuanto a los 7 llamados recibidos por bases navales argentinas el sábado 18 de noviembre, consideradas como pedidos de socorro producidos por el submarino, no fueron el primer signo de vida tan esperado.
“Recibimos el informe de la empresa que analizó las señales, pero las 7 tentativas no corresponden con el teléfono satelital del submarino”, sostuvo el vocero militar.
La armada argentina confirmó que el 15 de noviembre la embarcación había reportado una avería, una información que los responsables habían mantenido en silencio hasta el momento.
Para el jefe de la Base Naval de Mar del Plata, en el sureste de la provincia de Buenos Aires, se trató sólo de un “problema de baterías o un cortocircuito”, que no es suficientemente grave para disponer un procedimiento de emergencia.
En total, 14 navíos y 10 aviones están afectados a la búsqueda del San Juan, que rastrillan la zona en la que fue detectado por última vez el submarino, a 430 kilómetros al sureste de las costas argentinas.
Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Brasil, Chile y Uruguay participan en la búsqueda.
El submarino San Juan tenía previsto retornar a su base en Mar del Plata entre el domingo y el lunes últimos.
Si los intentos por ubicar y rescatar a los 44 tripulantes de la nave fracasan, el hecho se convertiría en la peor tragedia militar argentina tras la Guerra de Malvinas, ocurrida en 1982, en la que perecieron 649 efectivos argentinos, la mayoría de ellos conscriptos con escasa o nula formación marcial.
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