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Inteligencia artificial comienza a amenazar ciertos puestos de trabajo, sobre todo en Derecho

Según un artículo del “MIT Techology Review”, la Inteligencia Artificial (IA) está aumentando su tasa de penetración en el mercado y automatizando tareas realizadas actualmente por miles de personas, y esto solo en Estados Unidos, particularmente en el sector de la Justicia. Este escrito plantea que la investigación meticulosa, el estudio profundo de la jurisprudencia y la construcción de argumentos legales de derecho están siendo sacudidos por la penetración de algoritmos de IA que realizan aproximadamente las mismas tareas.

En diversos artículos de prensa aparecidos durante los últimos meses, se ponía de manifiesto que un gran porcentaje de empresas que utilizan IA se encontraban en un proceso de creación de empleo, sobre todo en las categorías profesionales más altas y por supuesto, en sectores ligados íntimamente a las nuevas tecnologías. En el terreno del derecho, y particularmente en los Estados Unidos, la historia parece ser diferente.  Los datos recogidos por el “MIT Technology Review” indican que hasta el año 2016, habían más de 1 millón 300 mil abogados con licencia activa y aproximadamente 200 mil personas que cumplían con funciones paralegales en los Estados Unidos. Un grupo de consultores de la agencia McKinsey estima que aproximadamente el 22 % del trabajo de un abogado y el 35 % del trabajo de los asistentes paralegales son fácilmente automatizables utilizando algoritmos de IA. En realidad, es un dato interesante desde varios puntos de vista pues indica que la IA no realizará todo el trabajo en este ámbito, y también deja entrever que será necesario un cambio, una restructuración y reajuste de ciertas tareas de las carreras tradicionales, o al menos una buena reorientación para poder trabajar en conjunto con las nuevas tecnologías y en definitiva no quedarse sin trabajo.

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Recientemente, se ha evidenciado que las herramientas utilizadas para la búsqueda y análisis de documentos legales basadas en IA, que analizaron y aprendieron estudiando millones de documentos legales, archivos de casos y resúmenes legales, han tenido mejores resultados desde el punto de vista de tiempo y eficacia de la investigación pues fueron capaces de marcar las fuentes apropiadas que los abogados necesitan para un caso. La IA, es capaz de aprender y almacenar toda esa información y mientras asimila los datos va mejorando los procesos y puliendo sus búsquedas y resultados, logrando así un trabajo rápido y eficaz. Uno de los casos emblemáticos es el de la reconocida empresa estadounidense JPMorgan que logró bajar sus costos operativos gracias a la inteligencia artificial. El banco comenzó con la utilización de un programa de IA llamado “Contract Intelligence” desde el primer trimestre de 2017 en Europa con una expansión progresiva hacia el mercado asiático y estadounidense con el que logró tareas de revisión de documentos que llevó a los asesores legales unas 360 mil horas de trabajo.

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Son numerosos las empresas y bufetes de abogados alrededor del mundo que implementan sistemas de IA para el análisis y revisión de contratos. Una de estas empresas es Kira Systems, que es parte de una plataforma de revisión de documentos contractuales que ya tiene contrato con los 10 bufetes más importantes de Estados Unidos y otras tantas firmas internacionales.

Los analistas insisten que el 2017 ha sido un año muy especial para el sector de las empresas de tecnología legal. Pero también advierten que sigue habiendo obstáculos a sortear para que la IA participe de lleno en la cuestión jurídica. El principal problema es la falta de accesibilidad a una mayor cantidad de documentación para lograr una mejor capacitación y aprendizaje del software. Adam Ziegler, director general de la “Harvard Law School Library Innovation Lab” tiene intenciones de facilitar la entrada de la IA para ayudar en este proceso. Para lograrlo, ayudó a llevar a cabo un proyecto que logró la digitalización total de los registros históricos de los tribunales de Estados Unidos para que los algoritmos puedan recibir el mejor entrenamiento posible.  Estos datos están disponibles en línea y gratis para ese fin.

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Es evidente que en diversos escenarios, la IA destruirá puestos de trabajo, y según los expertos, también creará muchos más y que en definitiva, el saldo será positivo con un número mayor de nuevos puestos de trabajo. El impacto será disímil dependiendo de los sectores que sean tocados por estas nuevas tecnologías.

En definitiva, según la tendencia, estamos siendo testigos de un cambio sustancial en el mercado laboral. Lo difícil pero no imposible para el futuro será encontrar personal capacitado para la gestión de esta nueva tecnología y para ocupar los cargos necesarios en este nuevo orden mundial.

Fuentes: MIT Tech Review, La Vanguardia, Expansión, Business Insider
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Categorías: Economía, Internet, ciencias y tecnologías
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