«La gran cantidad de reclamos que se ve en este conjunto de datos de CBC refleja realmente la falta de protección organizada, regular, y confiable para las mujeres en todo tipo de lugares en todo el mundo».
-Catherine Dauvergne, decana de la Allard Law School de la Universidad de British Columbia
La violencia doméstica representa la mitad de todos los reclamos de persecución de género en los últimos cinco años en Canadá.
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Khadija (un alias) solicitó el estatus de refugiado en Canadá en 2017. Foto: Brett Purdy / CBC News)
La investigación de CBC/Radio Canadá
La persecución de género incluye prácticas como el matrimonio forzado y la mutilación genital femenina, así como el abuso doméstico a manos de un compañero o miembro de la familia, lo que representó la mitad de los reclamos en los datos obtenidos por CBC.
La Comisión de Inmigración y Refugiados (IRB, por sus siglas en inglés) atendió casi 3.000 reclamos de violencia doméstica entre 2013 y 2017, y aceptó el 58 por ciento de ellos.
Los reclamos basados en violencia doméstica son, como todos los reclamos de refugiados, evaluados en base a dos elementos: el riesgo que enfrenta un individuo y hasta qué grado se puede proteger en su país de origen, dijo Catherine Dauvergne, decana de la Allard Law School de la Universidad de British Columbia y experto en leyes de refugiados y migración.
«En casos de violencia doméstica, o realmente cualquier daño persecutorio que ocurre en el ámbito privado, el análisis casi siempre termina enfocándose en qué tipo de protección estatal está disponible», dijo.
«La gran cantidad de reclamos que se está viendo en este conjunto de datos refleja realmente la falta de protección organizada, regular y confiable para las mujeres en todo tipo de lugares en todo el mundo».

Catherine Dauvergne, decana y profesora de la Facultad de Derecho Peter A. Allard, Universidad de Columbia Británica. Foto UBC
Los principales países de donde ellas vienen
En primer lugar se encuentra Nigeria, luego Haití, Afganistán, Nambibia, Pakistán, San Vicente, Ucrania y Djobouti, entre otros.
En general, ellas cruzan la frontera de Canadá a través de las provincias de Manitoba y de Quebec. Muchas lo hacen con niños pequeños.
Y llevan también el trauma de cicatrices, quemaduras y huesos rotos.
Mi esposo solía golpearme todo el tiempo. Se casó con otra mujer y él continuó abusando de mí y cuando no pude soportarlo más me fui.
CBC no identifica a estas mujeres, para protegerlas a ellas y a sus hijos que todavía viven en Djibouti, en el este de África.
Vengo de una familia muy pobre y la familia de él es muy rica y muy poderosa en mi país. Entonces, la primera vez que comenzó a abusar de mí, mi familia o yo no pudimos hacer nada al respecto.
La investigación del radiodifusor público canadiense reveló que una de cada seis mujeres solicitantes de asilo en Canadá está huyendo de la violencia doméstica, de los matrimonios forzados o de la mutilación genital femenina.
La mitad de ellas dicen que están escapando de maridos abusivos o de familiares.
Asiya Hirji es abogada en Toronto.
Ella dice que estas mujeres muy a menudo están traumatizadas y condicionadas a no hablar sobre su abuso, especialmente con los hombres, lo que puede causarles perjuicio cuando solicitan asilo.
Un problema principal es que una mujer que no divulga el verdadero alcance de su sufrimiento en su país de origen corre el riesgo de no ser aceptada como refugiada.
Las mujeres que citaron la persecución de género como causa de su pedido de asilo tenían menos probabilidades de ser aceptadas que las que lo hacían por razones políticas, religiosas o étnicas.
Entre los más vulnerables
Los refugiados que son mujeres y niñas se encuentran entre las personas más vulnerables del mundo, dijo Jean-Nicolas Beuze, representante de la Agencia de la ONU para los Refugiados en Canadá. Como tal, la violencia sexual contra ellas es generalizada.
Beuze vio esto de primera mano cuando trabajó en la República Democrática del Congo entre 2003 y 2007, una época en que la violencia sexual se utilizaba como arma de guerra.
Algunas de las víctimas tenían elementos como rocas y armas de fuego insertadas en ellas con tal violencia que el tejido entre la vagina y el recto estaba roto, dijo.
«Esas mujeres, desafortunadamente, no tenían acceso a tratamiento médico en el terreno y una de las únicas soluciones para nosotros era reasentarlas en un país como Canadá para que puedan recibir atención médica y reanudar una vida normal, » dijo.

Jean-Nicolas Beuze, representante de la Agencia de la ONU para los Refugiados en Canadá. CBC
«Canadá tiene una larga tradición de analizar todos los temas de violencia sexual y de identidad de género de una manera muy positiva y proporcionar las protecciones necesarias a las personas de aquellos países que no pueden hacerlo. Entonces, es importante que Canadá siga a la vanguardia de ese tipo de protección.
El método de la investigación de CBC
Los datos utilizados para esta historia se obtuvieron de la Comisión de Inmigración y Refugiados (IRB) a través de una solicitud de acceso a la información. Incluye 89,517 reclamos que finalizaron o concluyeron entre el 1 de enero de 2013 y el 30 de septiembre de 2017.
Estos datos se refieren a los solicitantes de refugio, o individuos que han presentado un reclamo en Canadá para la protección de refugiados. No incluye refugiados patrocinados por el gobierno o por entidades privadas.
Los datos se refieren a decisiones de la IRB y no necesariamente a casos individuales. En ocasiones, la IRB toma más de una decisión para la misma persona si la división de apelaciones o el Tribunal Federal devuelve el caso al consejo.
El país y la causa de la persecución se refieren a lo que un demandante le dice a un funcionario de inmigración o de servicios fronterizos cuando hace un reclamo por primera vez. La información puede cambiar a medida que un reclamo progresa a través del sistema y esos cambios no se capturan en estos datos.
RCI/CBC/Karen Puls
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