La reanudación de las negociaciones de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), será difícil mientras esta organización guerrillera no guarde la coherencia entre su discurso y sus acciones, declaró el martes el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.
Santos suspendió a finales de enero las negociaciones de paz con el ELN después de una serie de ataques en el norte del país que dejó ocho policías muertos y unos 40 heridos. En la última semana el ELN, considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, intensificó sus ataques contra oleoductos y carreteras.
“A esta organización le hemos exigido que tenga un mínimo de coherencia entre sus palabras de paz y sus acciones. Mientras no exista esa mínima coherencia por parte del ELN, reanudar los diálogos va a ser muy difícil”, afirmó el mandatario en el saludo anual al cuerpo diplomático acreditado en Colombia.
El Gobierno y el ELN, conformado por unos 2.000 combatientes, iniciaron unas negociaciones de paz en Ecuador en febrero de 2017.
El presidente colombiano Juan Manuel Santos y el líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko, se dan la mano tras firmar un acuerdo de paz en Bogotá en noviembre de 2016. (Foto: Jaime Saldarriaga/Reuters)
Pese a que por primera vez en la historia las partes acordaron un cese al fuego bilateral de más de tres meses que comenzó en octubre y finalizó a comienzos de enero, el ELN se negó a extender la tregua con el argumento de que había puntos por mejorar para evitar que las fuerzas militares colombianas aprovechen la situación para sacar ventaja.
Los representantes del grupo guerrillero, conformado en sus comienzos por sacerdotes católicos radicales, anunciaron recientemente en Quito, sede de los diálogos, su disposición a reiniciar la negociación.
El gobierno del presidente Juan Manuel Santos firmó un acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a finales del 2016 para poner punto final a un conflicto armado que duró más de medio siglo, dejando un saldo de 220.000 muertos.
Tras la firma de ese acuerdo de paz, las FARC se transformaron en un partido político que presentará un candidato a la presidencia del país en las próximas elecciones de mayo.
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