Ese es el título de un informe sobre la diversidad entre los educadores universitarios canadienses.
Dicho informe señala que, aunque las poblaciones de estudiantes son diversas, los profesores que les enseñan no lo son. Y que la falta de diversidad es persistente entre el personal docente de las universidades canadienses,
EscucheLas universidades canadienses hablan mucho sobre la importancia de la equidad y la diversidad en el campus.
Sin embargo, cuando se trata de la fuerza laboral académica, poco ha cambiado en la última década, con solo un puñado de profesores negros e indígenas, menos mujeres con codiciados puestos a tiempo completo que hombres, y «brechas salariales significativas» que penalizan al personal femenino y racializado , según un nuevo informe.
Isaac Saney es profesor de historia en la Universidad Dalhousie, en la provincia de Nueva Escocia.
Isaac Saney es profesor de historia en la Universidad Dalhousie. Dice que la información del reporte es pésima.
“Básicamente me dice que en más de dos décadas de programas en torno a la equidad, a los programas de promoción de la diversidad, la aguja no se ha movido tanto”.
El resultado son facultades que no reflejan el rango de antecedentes e identidades de los estudiantes a los que enseñan, dice el estudio, publicado por la Asociación Canadiense de Profesores Universitarios.
Con base en los datos del censo de 2016, el estudio proporciona una instantánea de la mano de obra y los ingresos de la universidad y resalta las diferencias arraigadas en los salarios y las posiciones.
«Los hallazgos son desalentadores», dice Pat Armstrong, profesora de sociología de la Universidad York y copresidente del comité de equidad de la asociación.
«El progreso es muy lento», dijo en una entrevista. «Está bastante claro que hay una gran brecha entre el cuerpo estudiantil y la facultad que les está enseñando».
Pat Armstrong, profesora de sociología de la Universidad York.
Armstrong dijo que la preocupación particular es la disminución significativa de los puestos de trabajo en la tenencia y la disminución del número de puestos de profesor asistente, que debería ser la vía para nuevos docentes de una variedad de antecedentes necesarios para cambiar la demografía dentro de la academia. Sin esos puestos, será un gran desafío abordar los desequilibrios actuales.
Una de las cosas más importantes aquí es la falta de empleo a tiempo completo. No vemos los tipos de trabajos disponibles que existían hace 15 años. Cada vez más, los trabajos son a tiempo parcial y vemos a estos grupos que buscan equidad en trabajos por contrato a tiempo parcial en lugar de trabajos a tiempo completo.
Según el informe, los cargos de profesor asistente disminuyeron un 22 por ciento en el período de 10 años que finalizó en 2016-17, una tendencia que dijo, «impedirá el progreso» de las mujeres, los académicos indígenas y otros grupos raciales que buscan puestos permanentes.
El informe también encontró:
*Los académicos aborígenes representaron aproximadamente el 1 por ciento de los profesores universitarios en 2016 y el 3 por ciento de los profesores universitarios, a pesar de que constituyen el 4 por ciento de la fuerza de trabajo y el 5 por ciento de los estudiantes de pregrado.
*El número de profesores universitarios negros apenas se ha movido en 10 años, representando el 2% de todos los profesores en 2016.
*La proporción de profesores universitarios racializados subió al 21% en 2016 del 17% en 2006. Sin embargo, representan solo el 15% de los profesores universitarios.
*Más mujeres tienen puestos de tiempo completo, pero principalmente en los rangos inferiores, que representan el 49 por ciento de los profesores asistentes, pero solo el 27 por ciento de los profesores titulares.
*La brecha salarial más frecuente es de las instructoras universitarias de mujeres racializadas, que ganan 63 centavos por cada dólar ganado por los hombres blancos, y las profesoras racializadas que ganan 68 centavos.
El otoño pasado, las universidades canadienses lanzaron el Plan de acción para la excelencia inclusiva destinado a promover la equidad, la diversidad y la inclusión en todos los niveles, incluso en la enseñanza, la investigación, la gobernanza y sus comunidades.
El plan, anunciado por Universities Canadá, y acordado por todos los presidentes universitarios en todo el país, también se comprometió a recopilar datos demográficos sobre los estudiantes y el personal docente.
Ese plan se da en medio de otras discusiones sobre qué deben hacer las instituciones postsecundarias para asegurarse de que sus rangos superiores reflejen la creciente diversidad del país y de debates incluso más amplios sobre cómo la raza, el género y la etnicidad juegan un papel en los conflictos del campus.
«En esencia, nos desafiaremos a nosotros mismos siendo públicos con nuestros datos», dijo Mike Mahon, presidente de la junta directiva de Universities Canada, el grupo de defensa nacional que representa a todas las universidades de Canadá.
Pat Armstrong dijo que la estrategia más efectiva para cambiar la composición de la fuerza laboral sería reducir la dependencia del personal contratado o a tiempo parcial. La vulnerabilidad de los trabajadores precarios estuvo en el corazón de la huelga de la facultad universitaria de la provincia de Ontario el otoño pasado y la seguridad laboral también es central en la huelga continua de 3.000 empleados contratados y asistentes docentes en la Universidad York, que han estado ausentes del trabajo durante un mes.
Angela Campbell es directora asociada de equidad y políticas académicas en McGill.
Ella dice que el estudio confirma lo que su universidad ya sabía y que ya está trabajando activamente para solucionarlo.
Siempre estamos contratando por la excelencia, ese es siempre nuestro criterio estándar pero somos de la opinión de que con los diversos grupos de candidatos y solicitantes continuaremos logrando la excelencia pero con una gran diversidad de candidatos.
Angela Campbell es directora asociada de equidad y políticas académicas en la universidad McGill de Montreal
Los hallazgos del informe no sorprendieron a Sharon McIvor, una abogada indígena, activista y profesora del Instituto de Tecnología del Valle de Nicola en Columbia Británica.
Pero enfatiza que la diversidad no es solo cambiar las caras en un lugar de trabajo. También significa abrazar las diferentes visiones del mundo y las formas de abordar la enseñanza, el aprendizaje y la evaluación que vienen con ellos, agrega.
El informe también encontró que aún existen brechas salariales entre profesores hombres y mujeres y entre profesores blancos y racializados.
Pat Armstong de la Asociación Canadiense de Maestros Universitarios dice que el cambio requerirá capacitar a las personas que hacen la contratación.
Michael Davies-Cole es estudiante de Derecho en Dalhousie.
Se identifica como negro e indígena y dice que el informe lo entristece.
Podría pasar años de escuela sin tener un profesor de color.
Isaac Saney dice que requerirá un replanteamiento de cómo funciona el racismo sistémico en Canadá.
CBC/Universities Canada
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