La cancelación se produce poco después de que Trudeau anuncia $ 30 millones en nuevos fondos para la ejecución del tratado comercial
La principal ministra de Canadá en el expediente del Tratado de Libre Comercio de América del Norte está cancelando sus planes de asistir a la cumbre de la OTAN en Bruselas para participar en las negociaciones comerciales decisivas en Washington D.C.
La ministra de Asuntos Exteriores, Chrystia Freeland, envía en su lugar a su secretario parlamentario, Omar Alghabra, a Bélgica.
Freeland y sus contrapartes de México y Estados Unidos se encuentran actualmente en el tercer día consecutivo de conversaciones cara a cara, en un intento de lograr un progreso significativo antes del 1 de mayo. Esas conversaciones continuarán este viernes; no hay noticias oficiales sobre cuándo volverá la ministra a Canadá.
Esa fecha es la fecha límite establecida por Estados Unidos para que Canadá y México firmen algún tipo de acuerdo con el TLCAN a fin de retener las exenciones que Washington otorgó a ambos países para que reduzcan las tarifas de acero y aluminio ordenadas por el presidente Donald Trump a principios de marzo.
Freeland dijo el jueves por la noche que, en lo que respecta a Canadá, las negociaciones y aranceles del TLCAN son cuestiones separadas.
Si bien es poco probable que se llegue a un acuerdo pleno en el TLCAN para esa fecha, Canadá busca obtener una exención permanente de las tarifas.
La administración de Trump teme que cualquier retraso adicional podría poner en peligro un acuerdo, dadas las realidades políticas. El proceso de ratificación de EE. UU tarda meses en completarse, los demócratas opositores podrían recuperar el control del Congreso después de los períodos intermedios de noviembre y un líder d la izquierda es el favorito para convertirse en el presidente de México el 1 de diciembre.
Para tranquilizar a los EE. UU el primer ministro Justin Trudeau anunció que a Global Affairs Canada y la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá se les otorgarán $ 30 millones adicionales en los próximos cinco años para fortalecer la implementación comercial.
Las conversaciones del TLCAN están encabezadas por el ministro de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, y el representante comercial de los Estados Unidos, Robert Lighthizer. (Edgard Garrido / Reuters)
El dinero se utilizará para evitar el transbordo de acero desde China y otros países a través de Canadá hasta los EE. UU para evadir las tarifas de los EE. UU.
Junto con ese dinero extra, el gobierno de Trudeau está haciendo cambios regulatorios que «ampliarían el alcance de los productos de acero y aluminio que deben marcarse con su país de origen», según un comunicado del gobierno.
«Los trabajadores y las industrias canadienses merecen igualdad de condiciones, y los seguiremos protegiendo de las prácticas comerciales desleales», dijo Trudeau en un comunicado el jueves.
«Parte de eso incluye asegurarnos de que las agencias de cumplimiento comercial canadienses tengan los recursos que necesitan para defender la competitividad de nuestros negocios y nuestras importantes relaciones comerciales en América del Norte».
La decisión de Freeland de permanecer en Washington D.C. para continuar las negociaciones sobre el TLCAN llega en un momento crítico para las conversaciones, a medida que aumentan las presiones y se dejan al descubierto las diferencias entre las tres partes.
CBC
Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.