En solo dos años, más de 100 personas en Canadá con estatus diplomático han solicitado asilo. (Mark Blinch / Canadian Press)

Diplomáticos en Canadá  que solicitan asilo

Más de 100 personas con estatus diplomático en Canadá han solicitado asilo en los últimos dos años.

Entre marzo de 2016 y abril de 2018, se registraron  30 casos que involucraron a 104 representantes extranjeros acreditados, o sus familiares, que buscaban la protección a través del estatus de refugiados.

Las estadísticas se incluyen en los informes de protocolo trimestrales de Global Affairs Canada (GAC) que se publicaron a través de la ley de acceso a la información. Los países de origen de los solicitantes de refugio están tachados en los informes.

Janet Dench, directora ejecutiva del Consejo Canadiense para los Refugiados, dijo que dado que los diplomáticos tienden a moverse en «círculos privilegiados», generalmente se piensa que son menos susceptibles de necesitar la protección de asilo.

Pero hay circunstancias que podrían llevar a esas personas  que sirven a sus países en el extranjero a huir de su país, dijo.

Por ejemplo, un cambio de régimen en el país podría llevar a los diplomáticos a reclamar el estatus de refugiados si sienten que podrían ser blancos de persecución de su regreso, dijo. Los agentes diplomáticos también podrían abandonar a sus gobiernos a los que representan si descubren que están cometiendo violaciones contra los derechos humanos, agregó.

«Cuando una persona que representa a un gobierno, denuncia las acciones de éste, puede convertirse  en blancos de persecución por parte de ese gobierno».

Janet Dench, directora ejecutiva del Consejo Canadiense para los Refugiados, dijo que existen circunstancias que podrían llevar a diplomáticos que sirven a sus países en el extranjero a huir de su país.

No es extraño entonces que un gobierno ofrezca a un miembro proveniente de una de minoría perseguidas un puesto en el extranjero para dar una imagen positiva de ese gobierno en el escenario mundial. Pero cuando esta persona tiene  la ocasión, puede elegir solicitar el refugio mientras está en tierra extranjera, dijo Dench.

Una persona que esconde su orientación sexual por temor a la persecución podría reclamar el estatus de refugiado para vivir libremente en Canadá, agregó.

Cuando los gobiernos caen

Pero Dench dice también que algunos diplomáticos pueden solicitar el estatus de refugiado por razones menos legítimas, cuando sus partidos son expulsados ​​del poder, por ejemplo, o para  escapar de acusaciones de abusos contra derechos humanos.

«Hay todo tipo de razones por las cuales alguien puede solicitar refugio, a pesar de haber sido sido un diplomático», dijo Dench.

«Al mismo tiempo, el gobierno canadiense, o cualquier otro gobierno que esté analizando estos reclamos, los examinará muy de cerca para asegurarse de que la persona no sea alguien que cometió abusos de derechos humanos graves como para no merecer la protección de refugiados. »

Cambios al regreso al país

Tres ex diplomáticos libios habían tratado de solicitar el estatus de refugiado después de haber sido declarados persona non grata en Canadá y expulsados en mayo de 2011. Los informes de entonces sugerían que los diplomáticos fueron expulsados por tratar de intimidar a estudiantes y otros en Canadá opuestos al presidente libio Moammar Gadafi , quien luego fue depuesto y asesinado.

El ex diplomático canadiense Paul Heinbecker dijo que la mayoría de estos reclamos de refugiados provienen de un cambio en las condiciones políticas en los países de origen de los reclamantes, como un cambio en el gobierno o un golpe de Estado. Las personas tratan entonces de solicitar asilo para evitar el regreso a sus países y terminar en la cárcel, dijo.

«El diplomático, o la familia diplomática o los miembros de la embajada, pueden solicitarel  asilo en Canadá en lugar de regresar a  su país y esperar que todo irá mejor», dijo.

Reclamaciones consideradas caso por caso

La Junta de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá (IRCC) dijo que no podía comentar ningún caso específico, pero agregó que el proceso de asilo funciona para ofrecer protección a las personas en Canadá que tienen un temor bien fundado de persecución, o que corren el riesgo de ser torturadas o castigadas de manera inusual, en sus países de origen.

Cada caso se evalúa según los méritos y se decide caso por caso por la Junta de Inmigración y Refugiados de Canadá.

«Según la ley, cualquier persona que solicite asilo en Canadá tiene derecho al debido proceso. Sin embargo, no hay garantías de que un solicitante de asilo pueda permanecer en Canadá al final de este proceso», dijo la portavoz del departamento Beatrice Fenelon.

Los informes trimestrales del protocolo sobre personas con estatus diplomático en Canadá también cubren incidentes de presuntas infracciones penales o de otro tipo, problemas de deuda financiera, protección infantil, infracciones relacionadas con vehículos u otros incidentes que requieren la respuesta de la policía.

Incluyen casos de conducir con una licencia suspendida, vandalismo de una embajada, amenazas telefónicas contra una misión y asistencia con una crisis de salud mental.

Acoso sexual, asalto, conducción peligrosa

Algunos otros incidentes citados en los informes:

En diciembre de 2017, un embajador en Canadá fue retirado por su gobierno después de dos incidentes separados reportados de acoso sexual, ninguno de los cuales condujo a cargos criminales. La directora de la división de África Occidental y Central informó a la oficina de protocolo del GAC que el nuevo embajador «expresó proactivamente su consternación y vergüenza con respecto a la conducta de su predecesor».

Un embajador en Canadá fue acusado de asalto.

El hijo de un funcionario diplomático fue acusado de tomar un vehículo sin permiso, huir mientras era perseguido por un agente de paz,  no detenerse en la escena de un accidente y causar daños a la propiedad.

Un embajador fue detenido y multado por conducir descuidadamente.

La policía local se acercó a la oficina de protocolo del GAC sobre un posible caso de trata de personas. Las quejas incluyeron acusaciones de pago insuficiente, exceso de trabajo, falta de alimentos y atención médica básica, abuso verbal y físico, retención de documentos personales y restricciones de movimiento fuera de la residencia oficial.

RCI con información de Kathleen Harris/CBC

Categorías: Inmigración y Refugiados, Política
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