La Canciller alemana Angela Merkel y sus aliados de la región de Baviera, al sur del país en la frontera con Austria, firmaron un acuerdo sobre política migratoria concluido este lunes.
Este acuerdo prevé el establecimiento de centros de tránsito en la frontera austro-alemana, para mantener a los migrantes que ya han solicitado asilo en otro país de la Unión Europea que estén a la espera de un acuerdo binacional sobre su regreso a su país.
Austria por su parte, establecerá medidas de protección de sus fronteras con Italia y con Eslovenia tras la firma del acuerdo alemán.
Si este acuerdo entra en vigor, «estaremos obligados de adoptar medidas para prevenir todas consecuencias negativas para Austria y su pueblo», dijo
el canciller austriaco Sebastian Kurz en una declaración, en la que también pidió que Berlín aclarara su posición. El Gobierno austriaco está dispuesto, en particular, a adoptar medidas de protección en las fronteras sur del país.
El comunicado de Kurz también está firmado por el vicecanciller Heinz-Christian Strache y el ministro del Interior Herbert Kickl, ambos miembros del Partido de la Libertad (FPÖ), una formación de extrema derecha aliada a los conservadores de Kurz en la coalición gobernante en Viena.
Estas declaraciones fueron hechas en el marco de la entrada de Austria a la presidencia semestral de la Unión Europea. Sebastian Kurz, líder conservador de 31 años de edad que dirige un gobierno de coalición con la extrema derecha, comenzó su discurso ante el Parlamento Europeo insistiendo en su edad y en el hecho de que Europa es «una evidencia» puesto que él tenía solo 10 años cuando la comunidad política europea se creó el 1993.
La reunión de los veintiocho países europeos en Bruselas finalizó el viernes con compromisos aún no claros sobre el refuerzo de las fronteras de la Unión Europea, las «plataformas de aterrizaje» fuera de Europa y los «centros controlados» para la recepción de migrantes en los países voluntarios europeos a los que llegan primero los solicitantes de asilo.
El joven líder austriaco también digo abogar por «nuevos canales de negociación con Rusia» para resolver el conflicto ucraniano, una mejor
la cooperación con África para frenar los flujos migratorios, y la apertura de negociaciones de adhesión con los países balcánicos Occidentales.
Durante los primeros cinco meses del año, aproximadamente 4.600 "entradas no autorizadas" fueron registradas en Alemania provenientes de Austria, según cifras de la policía alemana. De este total, 2.450 personas fueron devueltas a Austria. Ante un posible refuerzo de los controles en el lado alemán, Los austríacos temen ver cada vez más inmigrantes bloqueados en su territorio. Con informaciones de Reuters.
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