Víctimas y familiares reaccionan ante el informe presentado por el procurador Shapiro. Foto: AP Photo/Matt Rourke.

Crece el escándalo por sacerdotes abusadores en Estados Unidos

La iglesia católica de Estados Unidos se encuentra inmersa en un nuevo escándalo, tras la denuncia en contra de religiosos del estado de Pensilvania, a quienes se acusa de haber abusado de al menos 1.000 menores de edad.

Un informe del procurador general estadual, de más de 800 páginas, dio a conocer los resultados de dos años de investigaciones, sobre los actos que habrían cometido cerca de 300 religiosos, a los largo de siete décadas.

El documento se basó, en parte, en los propios archivos de las diócesis, entre los que se guardaban confesiones manuscritas.

El documento dejó al descubierto una historia de abusos sexuales en la iglesia católica del país. Foto: AP Photo/Matt Rourke.

Según el procurador Josh Shapiro, los curas acusados habrían abusado de cientos de menores de edad, valiéndose de la religión para obligar a sus víctimas a mantener el silencio en relación a esos actos.

Shapiro sostuvo que la pesquisa y el informe resultante son los más exhaustivos que se hayan producido en el país, que agrava la situación de la iglesia católica en relación con crímenes sexuales cometidos por sus religiosos en diversas partes del mundo, y cuando aún están frescas las huellas del sisma que provocó en Chile una situación similar, que obligó al papa a dejar cesante a la totalidad de la más alta jerarquía eclesial en esa nación sudamericana.

Los religiosos se sirvieron de “la fe como un arma” para dominar a sus víctimas, expresó Shapiro al presentar el documento. El funcionario citó el ejemplo de uno de los sacerdotes abusadores, que habría descrito a los niños que la virgen María debía lamer a Jesús para dejarlo limpio, justificando sus demandas de felaciones por parte de los menores.

El número de víctimas y de sacerdotes abusadores podría ser mayor, debido a que los archivos secretos de varias diócesis se encuentran perdidos, del mismo modo que muchas de las víctimas no accedieron a contar sus experiencias ni a producir denuncias concretas.

El cardenal titular de la diócesis de Washington, acusado de encubrimiento. Foto: cpimages.

En algunos de los casos, el tiempo transcurrido desde que se cometieron los abusos impediría la presentación de cargos contra los presuntos abusadores, mientras que al menos 100 de los sacerdotes señalados como responsables de esos actos ya fallecieron.

El documento resultante de la investigación, sumado a denuncias previas, deja al descubierto la práctica de abusos sexuales de larga data en la iglesia católica estadounidense, extendida a todo el país y pone al descubierto la actitud de la jerarquía, que conociendo esos actos optó por esconderlos, en lugar de denunciar a los responsables y someterlos a la justicia y las sanciones correspondientes.

Los arzobispos estadounidenses reconocieron que cerca de 17.000 personas en todo el país denunciaron haber sido abusadas sexualmente por clérigos y otros miembros de la iglesia.

Uno de los jerarcas religiosos nombrados en el reporte es el cardenal Donald Wuerl, que lidera la arquidiócesis de Washington, a quien se acusa de haber protegido a curas abusadores.

Categorías: Internacional, Política
Etiquetas: , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.