Un camarógrafo de noticias y otra persona fueron hallados muertos en la localidad turística mexicana de Cancún, según confirmó la oficina del fiscal local.
El reportero fue identificado por las autoridades del estado de Quintana Roo sólo por sus iniciales, pero una estación televisiva del lugar dijo que se trata de Javier Rodríguez Valladares, que se desempeñaba en el Canal 10 de la ciudad.
Según organismos defensores de los derechos de los periodistas, se trata de un suceso que se agrega a una larga lista en la que los trabajadores de prensa suman víctimas en uno de los países más peligrosos del mundo para ese sector.
Los periodistas vienen denunciando la violencia contra su gremio. REUTERS/Carlos Jasso.
Por el momento no se conoce la identidad de la otra persona fallecida.
Al menos 12 reporteros fueron asesinados el año último en ese estado del sur del país. Calificado en el pasado como uno de los más seguros en todo el territorio mexicano, Quintana Roo ha sido escenario de al menos 6 asesinatos de periodistas en lo que va de 2018.
Los ataques contra los periodistas han incremetado el grado de su violencia con el paso del tiempo. En algunos casos, los trabajadores de prensa han sido ultimados a balazos incluso cuando se encontraban en plena tarea, como el caso de un comunicador que fue asesinado mientras se encontraba al aire, durante su programa de radio.
En la mayoría de los casos los crímenes son adjudicados a la ola de violencia desatada hace décadas por los cárteles del narcotráfico.
La calma que era tradicional en Quintana Roo, en el que se encuentran algunos de los centros veraniegos más visitados por el turismo nacional y extranjero, se ha ido deteriorando desde hace tiempo y las autoridades han dado ya signos de preocupación, ante la posibilidad de que la violencia prive a la región de una de sus fuentes de ingreso, si la llegada de visitantes comienza a mermar.
Apenas 24 horas antes, 5 personas murieron en una balacera en un restaurante del balneario. REUTERS/Israel Leal.
Las bandas locales del narcotráfico se enfrentan periódicamente, en una guerra abierta para asegurarse el control del lucrativo mercado de la droga. En el pasado, los centros turísticos como Cancún habían quedado al margen del accionar de los cárteles, pero la situación parece estar cambiando.
Dos periodistas fueron asesinados en el estado en los últimos meses, incluyendo a uno que recibió amenazas de muerte durante meses y que informó a la Comisión de Defensa de los Periodistas que había sido agredido por un grupo de policías, debido a tu tarea profesional.
La existencia razones políticas y de vínculos entre los grupos violentos y dirigentes en diversos sectores y jerarquías en México es citada con frecuencia en relación con los crímenes de periodistas.
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