El edificio se convirtió en una gran bola de fuego. REUTERS/Ricardo Moraes.

Temen destrucción casi total en museo de Río de Janeiro

Los expertos forenses e investigadores esperaban poder ingresar a los restos calcinados del edificio que albergó al Museo Nacional de Río de Janeiro, que fue consumido por un incendio mayor durante el fin de semana.

Los peritos aguardan poder constatar el grado de destrucción que el siniestro produjo en los cerca de 20 millones de piezas arqueológicas e históricas, que conformaban la colección de uno de los museos más importantes en su género en América Latina.

Además de los daños producidos por las llamas, las autoridades temen que la estructura que quedó en pié pueda colapsar, debido a la debilidad que presentan los muros y lo poco que quedó de cielo raso.

Bomberos y voluntarios ayudaron a salvar algunos artefactos. REUTERS/Ricardo Moraes.

Hasta el momento no fue posible establecer las causas del fuego que redujo a cenizas buena parte de las instalaciones dependientes de la Universidad Federal de Río de Janeiro.

El museo albergaba en su interior gran cantidad de artefactos y piezas históricas, de Brasil y de otras partes del mundo, incluyendo el cráneo de Luzia, un fósil de más de 12.000 años de antigüedad, perteneciente a la que se considera la mujer más antigua que haya habitado en suelo latinoamericano.

Los expertos temen que al menos el 90 por ciento de la colección que poseía el museo haya sido destruida.

Mientras tanto, comienzan a ganar protagonismo las acusaciones que hablan de años de políticas gubernamentales negligentes hacia la preservación del patrimonio histórico, que en el caso específico del Museo Nacional dejaron a su edificio con reparaciones pendientes, mantenimiento insuficiente y escasos recursos incluso para asegurar su funcionamiento.

El edificio principal quedó prácticamente destruido. REUTERS/Ricardo Moraes.

La entidad albergaba una gran cantidad de especímenes de gran valor paleontológico, antropológico y biológico.

Además del cráneo de Luzia, también contaba con una momia egipcia y el meteorito más grande descubierto en Brasil, tal vez uno de los pocos objetos que haya logrado sobrevivir al siniestro.

El hecho provocó la inmediata reacción de parte de la opinión pública y de entidades nacionales e internacionales, que en algunos casos se apresuraron a prometer los fondos necesarios para colaborar con la reconstrucción de la sede.

Algunos analistas señalaron al incendio como una metáfora de la situación de decadencia en la que se encuentra Brasil, inmerso en una crisis política y estancamiento económico.

Categorías: Internacional, Política, Sociedad
Etiquetas: , , ,

¿Encontró un error? ¡Pulse aquí!

Por razones que escapan a nuestro control, y por un período de tiempo indefinido, el espacio de comentarios está cerrado. Sin embargo, nuestras redes sociales siguen abiertas a sus contribuciones.