El robo de vehículos sigue siendo uno de los delitos más frecuentes en Canadá.
En ese sentido, las camionetas de la serie F de la compañía Ford dominan la preferencia de los ladrones.
Según el informe anual de la Oficina del Seguro de Canadá, las camionetas F350 ocupan los primeros cinco puestos de los vehículos más robados en distintas jurisdicciones, mientras que el modelo F250 del mismo fabricante ocupa otros tres lugares.
El reporte indica que los vehículos utilitarios son los más robados en la provincia de Quebec, entre ellos los de las marcas Acura, Toyota y Honda, mientras que en Ontario, las sustracciones apuntan a los SUV o vehículos utilitarios deportivos, como los modelos Tahoe o Silverado de la automotriz Chevrolet.
El robo de automóviles parece ir en aumento en todo Canadá. Foto: iStock.
En cuanto a la provincia de Alberta, los modelos de Ford siguen dominando el listado de robos y en la región de las provincias del Atlántico es el modelo Maxima de Nissan el más sustraído, seguido por el Silverado de Chevrolet y el Jeep Liberty.
Como informa la oficina canadiense de estadísticas, la policía constató 85.000 incidentes de robos de automóviles en 2017, lo que representa un incremento de 5.900 casos más que en 2016, que se traduce en un alza del 6 por ciento en ese tipo de delito.
El aumento más pronunciado en los robos de vehículos lo registró la provincia de Nuevo Brunswick, con el 28 por ciento, seguida por Ontario con 15 por ciento, Quebec 7 por ciento, Alberta 6 por ciento, Columbia Británica 2 por ciento y Terranova y Labrador 1 por ciento.
La entidad sostuvo que los autos robados suelen ser vendidos a compradores desprevenidos, que no conocen la procedencia del producto. También pueden ser desarmados, para comercializar sus piezas o, incluso, utilizados para cometer ilícitos.
El robo de identidad es facilitado por los objetos y documentos personales dejados dentro de los autos. Foto: iStock.
Otra opción, que suele ser frecuente, es que los coches robados sean enviados a mercados en el exterior, principalmente si se trata de autos de lujo.
Las autoridades advierten además que, a partir de los objetos y documentación que los delincuentes pueden hallar dentro de los autos, se abre la posibilidad de que se produzcan robos de identidad.
En ese sentido, más de 17.500 casos de robos de identidad fueron denunciados en el país en 2017.
La oficina del seguro advierte también que numerosos modelos automotores son el blanco de las bandas dedicadas al blanqueo de dinero ilegal. En paralelo, el crimen organizado suele utilizar el dinero obtenido por la venta de autos robados para financiar sus actividades ilícitas.
La baja tasa de recuperación de autos robados en Canadá es un indicio de la participación del crimen organizado en la actividad y de la exportación de los automóviles a partir de poblaciones fronterizas, con escasa vigilancia policial.
Fuente: The Canadian Press
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