El servicio ruso de seguridad nacional FSB informó este lunes que detuvo a un estadounidense sospechoso de cometer actos de espionaje en Moscú y que se abrió un caso criminal en su contra.
El FSB afirmó que el presunto espía fue detenido el 28 de diciembre, pero no aportó detalles sobre la naturaleza del caso.
El servicio en inglés de la agencia de noticias TASS identificó al estadounidense como Paul Whelan. La agencia Reuters no pudo confirmar esta información.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso dijo que no podía dar más detalles, pero aseguró que la Embajada de Estados Unidos en Moscú fue informada sobre esta detención.

La representación diplomática estadounidense no quiso comentar de forma directa la situación y refirió las preguntas de los periodistas a la oficina de prensa del Departamento de Estado en Washington.
Según la ley rusa, una condena por espionaje puede significar entre 10 y 20 años de cárcel.
Más temprano este mes, la rusa Maria Butina se declaró culpable en una corte estadounidense por un cargo de conspiración en un acuerdo con fiscales, y admitió haber trabajado con un funcionario ruso para infiltrarse en grupos activistas y políticos conservadores estadounidenses como una agente de Moscú.
Las relaciones de Rusia con Estados Unidos se han deteriorado desde que Washington rechazó la incorporación de la península de Crimea a la soberanía de Rusia en 2014, tras un referéndum.
Desde entonces, Washington ha impuesto, junto a otros gobiernos occidentales, una serie de sanciones contra funcionarios, compañías y bancos rusos.
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