Según Naciones Unidas, casi todos los países del mundo han admitido, algunos a regañadientes y otros más convencidos, que el cambio climático constituye una amenaza cada vez mayor para el desarrollo, las iniciativas destinadas a erradicar la pobreza y el bien estar de los ciudadanos.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, GIEC, afirma que las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero siguen aumentando y si seguimos así, el aumento de la temperatura a nivel mundial superará con creces el límite de 2 grados centígrados establecido como objetivo por los países para evitar los efectos más peligrosos del cambio climático.
Ahora bien, en la lucha contra el cambio climático, todos tenemos que aportar nuestro granito de arena. En los más pequeños gestos que estén a nuestro alcance. En esta lucha se está hablando cada vez más la reducción de nuestra huella ecológica. ¿Pero cómo hacerlo? Pues bien, un comerciantes de Montreal, JP. Loignon copropietario de los Cafés Oui mais non y La graine brulée propuso esta semana un gesto bastante simple. Y como él trabaja en el campo del café, su iniciativa consiste en atacar el problema de los vasos de cartón desechables no reciclables en los que se sirve el café para llevar.
(Foto: Facebook La Tasse)
Los que frecuentan tiendas como Starbucks por ejemplo, que son muy populares en casi todo el mundo, ya conocen los diferentes tipos de vasos desechables que se utilizan para servirnos nuestro café para llevar o para consumir en lugar mismo. Para tener una idea de la huella ecológica que dejamos los consumidores de café en vasos desechables, aquí en Montreal solo en el barrio Villeray de desechan alrededor de 170.000 vasos anuales. Solo en ese barrio. Y en todo Canadá, se habla de entre 1.500 y 2.000 millones de vasos desechables.
El problema con esos vasos de cartón es que NO son reciclables debido a una pequeña capa al interior que los vuelve impermeables. En su esfuerzo por reducir la huella ecológica de sus comercios, JP. Loignon decidió atacar ese problema con La taza. Que es un vaso plástico de doble pared para que el cliente no se queme y con tapa a rosca.
Nos unimos a un pequeño equipo de especialistas en eco-responsabilidad que estaba en el eco-barrio de Villeray en esa época para tratar de diseñar un producto, no para reemplazar la taza personal de viaje, los que tienen sus tazas personales porque saben que son consumidores de café para llevar, porque sigue siendo todavía una muy buena opción. Pero si la olvidamos y estamos obligados de tomar un vaso desechable de vez en cuando, entonces La Taza responde muy bien a eso.
(Foto: Facebook La Tasse)
Es una taza por la cual se paga un depósito de 5 dólares. Es una taza de plástico reutilizable. La idea detrás era reducir la huella ecológica dejada por la utilización de los vasos de cartón desechable no reciclables del café para llevar. Loignon dice que en sus comercios sigue teniendo los vasos de cartón, porque no quiere imponer nada a sus clientes, ni hacerle la moral a nadie. Y si un cliente, por cualquier circunstancia y razón que sea, desea que se le sirva su café en un vaso de cartón, se le sirve sin ningún problema. Pero…
Pero si quiere La taza…de todas formas la proponemos sistemáticamente en el Café. Lo único que hacemos es agregar un depósito de 5 dólares al precio del café. Y ese depósito se puede recuperar al momento en que se devuelva esa taza. Y lo interesante es que funcionamos en red. No tienen que venir a devolverlo a nuestra tienda. La tomamos en el punto A nos llevamos nuestro café y devolvemos La Taza en el punto B, en otro Café que participe y se devuelven los 5 dólares simplemente.
El Café del punto B, lava la taza y vuelve a servir un café a otro cliente. El cliente no necesita lavar su propia Taza. JP.Loignon dice que desde hace 2 años que el concepto funciona y que otros 12 Cafés se han sumado a la iniciativa.
(Foto: Facebook La Tasse)
Y lo interesante, dice JP.Loignon, es que en la actualidad hay alrededor de 70 Cafés y otros organismos en Quebec que están interesados en el concepto. La Taza se lanzó a finales del verano pasado sin hacer mucha promoción porque no tenían suficiente inventario en reserva.
Dentro de poco La Taza comienza una campaña de financiamiento participativo. Pero la idea es que La Taza se vuelva una alternativa al vaso de cartón desechable en toda la provincia de Quebec. Así, si una persona compra un café en Montreal, puede dejarla en Sherbrooke por ejemplo.
Por el momento solo los pequeños comercios han adoptado la iniciativa. Los grandes como Tim Hortons, Starbucks y otras grandes compañías no han aceptado la invitación a participar. Habrá que dejar cierto tiempo a la idea para que germine y contribuir así a la disminución de nuestra huella ecológica un Taza a la vez.
Alain Gravel entrevistó a JP.Loignon
RCI/Radio Canadá/Internet
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