Los presidentes de China y de Francia prometieron el martes actuar «conjuntamente para constituir una respuesta global a la erosión de la biodiversidad». China será la sede de una conferencia de la ONU en 2020 sobre este tema que se espera logrará cambios fundamentales.
Xi Jinping y Emmanuel Macron dijeron querer reafirmar su compromiso de abordar juntos los desafíos del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la protección del medio ambiente. Para ello «seguirán desempeñando, como lo hicieron al margen del G20 en Buenos Aires, un papel de liderazgo y movilización, basado en los resultados de la 24ª Conferencia de las Partes (COP24) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que dotó con éxito al Acuerdo de París de normas de aplicación.»
Otro de los aspectos destacados será el trabajo conjunto para garantizar el éxito de la Cumbre del Secretario General de las Naciones Unidas sobre el Clima que se celebrará el 23 de septiembre de 2019, movilizando a las diversas partes interesadas y dirigiendo los trabajos preparatorios sobre la financiación de la lucha contra el cambio climático y la fijación de precios del carbono.
Defensa del Acuerdo de París
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, gesticula lo que él cree que significan las cantidades de cambios de temperatura cuando anuncia su decisión de que Estados Unidos se retirará del histórico Acuerdo sobre el Clima de París en el Jardín de Rosas de la Casa Blanca en Washington, Estados Unidos, el 1 de junio de 2017. (Foto: ©REUTERS/Joshua Roberts)
Para contrarrestar la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París, ambos países dijeron comprometerse a aplicarlo en todas sus dimensiones, a reforzar la capacidad de cumplir los compromisos y a comunicar para 2020 su estrategia de desarrollo a largo plazo con bajas emisiones de gases de efecto invernadero para mediados de siglo.
También anunciaron que trabajarán juntos para promover la ratificación y aplicación de la enmienda de Kigali al Protocolo de Montreal sobre la reducción de los HFC y para promover la mejora de las normas de eficiencia energética en el sector de la refrigeración.
En un comunicado común, subrayaron la importancia de reorientar los flujos financieros públicos y privados hacia la lucha contra el cambio climático y la protección de la biodiversidad, movilizando financiación sostenible para el clima en los países en desarrollo, promoviendo la armonización de las prácticas de las instituciones de desarrollo con los objetivos del Acuerdo de París y los objetivos del Convenio sobre la Diversidad Biológica, y trabajando para garantizar el restablecimiento y la gestión eficaz del Fondo Verde para el Clima.
Lucha contra los delitos medioambientales
15 toneladas de marfil (colmillos de elefantes) confiscadas a contrabandistas y cazadores furtivos se prepara antes de ser quemado para conmemorar el Día Mundial de la Vida Silvestre en el Parque Nacional de Nairobi el 3 de marzo de 2015. (Foto: ©REUTERS/Thomas Mukoya)
Otro de los aspectos esenciales de la comperación entre Pekín y París será el combate a los delitos contra el medio ambiente, en particular la caza furtiva y el tráfico de especies amenazadas de fauna y flora y de sus productos, así como la transferencia transfronteriza ilegal de desechos sólidos, prohibiendo la entrada y salida ilegal de esos objetos a través de sus fronteras, y destacan la importancia de la ordenación sostenible de los bosques tropicales como sumideros de carbono y lugares de alta biodiversidad mundial.
Fuentes: Agencia France-Presse y Presidencia de Francia
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