El presidente filipino repatriará 69 de los 103 contenedores de desechos que, según se informa, fueron enviados ilegalmente desde Canadá hace varios años, según un portavoz.
En una conferencia de prensa, el portavoz de Rodrigo Duterte, Salvador Panelo, anunció el miércoles que el presidente había ordenado a los funcionarios que buscaran una empresa privada de transporte para llevar los desechos de vuelta a Canadá.
La posición inflexible del Presidente es una posición de principio: Filipinas, como nación soberana independiente, no debe ser tratada como basurero por otras naciones extranjeras.
Canadá dice que los desechos, exportados a Filipinas entre 2013 y 2014, fueron una transacción comercial no respaldada por el gobierno canadiense.
Desde entonces, Canadá se ha ofrecido a recoger la basura y los dos países estaban en proceso de organizar la transferencia.
Pero Canadá no cumplió con la fecha límite del 15 de mayo fijada por Manila para retirar el cargamento, lo que llevó a Filipinas a retirar a los principales diplomáticos de Canadá la semana pasada.
Un cartel en la embajada de Filipinas en Ottawa, Ontario, Canadá, el 16 de mayo de 2019. REUTERS/Chris Wattie
La escalada de un conflicto anunciado
El impasse actual comenzó hace un ya un tiempo. El 16 de mayo el gobierno filipino llamó el jueves a su embajador y a todos sus cónsules en Canadá para protestar por la lentitud de Ottawa en la recogida de contenedores de residuos enviados ilegalmente a Filipinas hace varios años.
El ministro filipino de Asuntos Exteriores, Teodoro Locsin Jr., dijo el jueves por la mañana en Twitter que Filipinas «mantendrá una presencia diplomática reducida en Canadá hasta que su basura sea enviada devuelta».
Sin embargo, hasta nuevo aviso, ya no habrá un embajador o cónsul filipino en Canadá.
El Primer Ministro Justin Trudeau dijo la semana pasada que Canadá estaba trabajando con las autoridades filipinas para alcanzar una pronta resolución del conflicto, pero no especificó un calendario.
ARCHIVO – En esta foto de archivo del 7 de mayo de 2015, activistas ambientales filipinos sostienen eslóganes sobre los 50 contenedores de desechos que fueron trasladados de Canadá a Filipinas hace dos años, durante una protesta frente a la embajada canadiense en el distrito financiero de Makati, al sur de Manila, Filipinas. El secretario de Relaciones Exteriores de Filipinas dijo que el jueves 16 de mayo de 2019, el embajador y los cónsules en Canadá están siendo retirados del servicio debido a que Ottawa no recuperó los camiones cargados de basura que, según funcionarios filipinos, fueron enviados ilegalmente a Filipinas hace años. (Foto: AP Photo/Aaron Favila, File)
La agencia Reuters pidió a la embajada canadiense en Manila comentarios sobre este asunto, pero hasta el miércoles no ha recibido respuesta a la solicitud.
Filipinas ha realizado varias protestas diplomáticas ante Canadá desde que un tribunal dictaminó en 2016 que la basura debía ser devuelta.
Los envíos estaban etiquetados como conteniendo plásticos para ser reciclados en Filipinas, pero estaban llenos de una variedad de basura, incluyendo pañales, periódicos y botellas de agua.
RCI/Associated Press/Radio-Canada/Reuters
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