El peronismo se impuso en casi todo el país. REUTERS/Agustin Marcarian.

La derecha pierde las elecciones primarias en Argentina

El gobierno argentino sufrió una derrota contundente en las elecciones presidenciales primarias llevadas a cabo el domingo en ese país de América Latina.

El candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, y su compañera de fórmula, la ex presidenta Cristina Fernández, obtuvieron una ventaja que superó las previsiones más optimistas, lo que deja a los postulantes de la oposición en una situación propicia para imponerse en las elecciones previstas para el mes de octubre.

Con casi el 89 por ciento delos votos escrutados, los candidatos kirchneristas logran el 49,19 por ciento de los votos emitidos, mientras que el oficialismo, que postuló al actual mandatario, el empresario Mauricio Macri, llega al 33,12 por ciento.

El macrismo enfrenta el peor escenario con vistas a las elecciones de octubre. REUTERS/Luisa Gonzalez.

Se prevé que los datos finales se conocerán el miércoles, cuando se lleve a cabo el recuento oficial de los sufragios.

El oficialismo logró imponerse sólo en la capital federal y en la provincia de Córdoba, aunque en el primer caso por una diferencia menor a la prevista.

En la ciudad de Buenos Aires, uno de los distritos más poblados del país y tradicionalmente esquivo al peronismo, con 96,25 por ciento de las mesas contabilizadas, el actual jefe del gobierno local, Horacio Rodríguez, llega al 50,56 por ciento de los votos, mientras que el candidato opositor, Matías Lammens suma 34,73 por ciento.

La desilusión del gobierno por la amplitud de su fracaso electoral puedo verse en el rostro de sus candidatos, incluyendo al propio Macri, quien reconoció que había perdido la votación incluso antes de contarse con datos provisorios sobre la jornada electoral.

El sistema de cómputos contratado por el gobierno estuvo paralizado durante varios minutos, justo en el momento en que, según había decidido la justicia electoral, se debía comenzar a difundir los primeros datos sobre la votación.

Cristina Fernández agradeció a los votantes desde la Patagonia, a donde viajó para votar. REUTERS/Agustin Marcarian.

La derrota del gobierno fue aún más contundente en la provincia de Buenos Aires, uno de los principales distritos electorales del país, donde el candidato del Frente de Todos, el ex ministro de Economía Axel Kicillof, obtiene 52,53 por ciento de las papeletas, cuando ya fueron contabilizadas el 86,08 por ciento de las mesas de votación en esa jurisdicción.

Los resultados se traducen en una dura derrota para la actual administración, criticada por diversos sectores ante la situación económica complicada que vive el país, con la desocupación en aumento, el cierre de industrias, la baja del consumo, el alto endeudamiento externo y la falta de transparencia, que había sido una de las promesas de Macri desde su primera campaña electoral, antes de llegar al gobierno en diciembre de 2015.

Es, al mismo tiempo, una reivindicación para la ex mandataria Cristina Fernández, quien bajo el gobierno de Macri ha sido objeto de numerosas acusaciones y causas judiciales, además de verse sometida a críticas constantes por parte de los pricipales medios de comunicación, concentrados en manos de grandes grupos empresariales, que en su mayoría expresaron su simpatía con el gobierno.

Categorías: Internacional, Política
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