El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó al ex mandatario colombiano Álvaro Uribe de complotar para asesinarlo.
Durante una aparición televisiva, el titular del gobierno venezolano se refirió a lo que calificó como un complot entre Uribe, el embajador estadounidense Francisco Santos y el opositor exiliado Lester Toledo.
Maduro, que mantuvo un tono de enfrentamiento constante con el ex mandatario colombiano, había hecho referencia en el pasado a presuntas conspiraciones para terminar con su vida, señalando a Uribe como un colaborador de Estados Unidos en la región.
Uribe se desempeña actualmente como senador. REUTERS/Luisa Gonzalez.
El ex titular del Ejecutivo de Colombia fue durante su mandato un crítico acérrimo del chavismo en Venezuela, expresando en sucesivas ocasiones su desacuerdo y oposición a las políticas implementadas tanto por Hugo Chávez como por Nicolás Maduro.
Según el líder venezolano, el plan para acabar con su vida contemplaba la participación de 32 mercenarios, que debían asesinarlo no sólo a él, sino también a varios integrantes de su administración.
El presidente venezolano agradeció la protección de dios, a la que señaló como la razón que impidió que el crimen se llevara a cabo.
Las declaraciones de Maduro fueron desmentidas por el ministro colombiano de Relaciones Exteriores, Carlos Holmes, que calificó a los dichos como “delirios” y “acusaciones difamatorias” por parte del mandatario, al que definió como “dictador”.
Por su parte, Lester Toledo, un opositor venezolano que se encuentra en el exilio en la vecina Colombia, se desempeña en la actualidad como coordinador de las iniciativas para llevar a cabo ayuda humanitaria a su país, nombrado en esa función por el titular de la Asamblea Nacional venezolana, Juan Guaidó.
En 2018, un dron cargado con explosivos estalló frente al palco donde estaba maduro. AP Photo/Ariana Cubillos.
Las relaciones entre Maduro y el actual presidente colombiano no son mejores.
El líder chavista suele calificar a Iván Duque como un “lacayo” de los intereses de Estados Unidos en la región y afirmó en varias ocasiones que los sucesivos gobiernos colombianos han estado dispuestos a convertir a Colombia en una base de operaciones de Washington, desde donde la Casa Blanca podría operar para hacer caer a su gobierno e, incluso, lanzar una invasión militar sobre el territorio venezolano.
Maduro señaló también a las autoridades colombianas de estar involucradas en la explosión de un dron durante un desfile militar, ocurrida en 2018, que fue catalogada por las autoridades venezolanas como un intento de asesinato contra el jefe de Estado.
Con información de The Canadian Press.
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