El Papa Francisco denunció el domingo «la cultura de la comodidad» que conduce a la indiferencia ante la crisis mundial de la migración y de los refugiados.
Estas declaraciones fueron hechas en el marco de la Jornada Mundial del Migrante y Refugiado 2019 de las Conferencias Episcopales del mundo.
El papa que ha hecho del cuidado de los migrantes un sello de su papado habló durante una misa para el Día Mundial del Migrante y el Refugiado.
Pero su mensaje encontró resistencia política en el anterior gobierno populista de Italia, durante el cual el ex ministro del Interior de línea dura, Matteo Salvini, hizo campaña para impedir la llegada a Italia de migrantes rescatados en el mar por grupos humanitarios.
Durante su homilía del domingo, el Papa también señaló que las armas que alimentan las guerras son a menudo producidas y vendidas en otras regiones «que luego no están dispuestas a acoger a los refugiados generados por estos conflictos».
Muchos migrantes y refugiados de conflictos en todo el mundo asistieron a la Misa en la Plaza de San Pedro, que se cerró con la presentación de una estatua de bronce del artista canadiense Timothy Schmalz que representaba a migrantes embalados en un barco.
El escultor Timothy P. Schmalz posa con su estatua el 29 de septiembre de 2019. (Foto: ©REUTERS/Remo Casilli)
Schmalz dijo que su objetivo al crear Angels Unawares era obtener la misma empatía e identificación con los temas que su serie Homeless Jesus, presentada frente a iglesias de todo el mundo – en este caso, para otro grupo de personas que a menudo se considera una carga para la sociedad.
Aunque Angels Unawares es una obra de arte, dijo, también lo ve como «un mensaje para dar la bienvenida a los desconocidos». La estatua ‘muestra las caras del mundo’ ya que representa a los migrantes amontonados en una balsa o en un barco, y que se dirigen hacia un futuro incierto.
Estatua Angels Unawares de Timothy Schmalz (Foto: ©REUTERS/Remo Casilli)
Sus vestimentas significan que provienen de diferentes culturas y conflictos históricos, entre ellos un judío jasídico que escapó de la Alemania nazi, un sirio que huyó de la guerra civil, un refugiado polaco que huyó del régimen comunista. Sobre las cabezas de los refugiados se cierne un conjunto de alas de ángel. El sitio web de Schmalz dice que la inspiración para su estatua proviene de un pasaje de Hebreos 13:2 en el Nuevo Testamento: «No olvides mostrar hospitalidad a los extraños, porque así algunos han hospedado a ángeles sin darse cuenta.»
El Papa y cuatro refugiados de varias partes del mundo develaron juntos Angels Unawares (Ángeles sin saberlo) en la Jornada Mundial del Emigrante y el Refugiado.
Durante la Misa, un coro multiétnico cantó y el incienso quemado vino de un campo de refugiados en el sur de Etiopía, donde los refugiados están reavivando una tradición de 600 años de recolección de incienso. El Vaticano dijo que el incienso «nos recuerda que los refugiados también pueden prosperar, no sólo sobrevivir».
RCI/Associated Press/Reuters/CBC News
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